AMIGOS POR UNA TARDE

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Después de lo sucedido pasaron los días, solo vi a el profesor Theo en el recreo o cuando iba a su oficina, no le di importancia sobre el tema con Jonas, tal vez no tuvo un buen día y se desquito conmigo, no lo estoy perdonando ni nada es solo que no me quiero calentar la cabeza.

Desperté cuando sonó la alarma la verdad estoy muy cansada pero no quiero llegar tarde ya que me toca con el profesor Theo, veo la fecha de hoy en mi teléfono y hoy es catorce de Junio; hoy se cumple un año desde que paso lo de mi papá, y no puedo no ponerme triste, pero la vida sigue tengo que estar bien por él. Voy al baño hago mis nececidades y voy a mi closet elijo unos pantalones de mezclilla y una playera blanca con una chamarra de mezclilla con unos tenis blancos, guardo mi laptop en mi mochila y bajo, veo a mi mamá en la mesa con mis hermanos y Tom, creo que se quedó dormir la verdad no sé ayer llegue tan cansada que solo recuerdo cuando llegue y les dije que ya había llegado.

Lily: ¿Hola, hija, vas a desayunar con nosotros? -me preguntó-.

Arlett: No, ma voy a tomar el autobús, así no llego tarde -le dije mientras agarraba una manzana, le di un beso a mi mamá en la mejilla y a mis hermanos en la cabeza, y finalmente me despedí de Tom con la mano y una sonrisa.

Durant el camino al autobús fue difícil no llorar por él lo extraño demasiado, yo quería que viera todos mis logros, que vea a mis hermanos crecer, que se riera conmigo, debí hablar más con él en mi cabeza había tenía tantas preguntas.

Así surgió el viaje hasta llegar a mi destino, hay algo más horrible que tener un nudo en la garganta y tener tantas preguntas sin que nadie te las pueda responder. Al llegar a la sala de la universidad no tenía ganas de hablar con nadie, soy una persona muy expresiva y cuando estoy triste o enojada se me nota en la cara, así que no quiero saber de nadie vi a Enzo y lo salude con la mano al igual que Layla trate de disimular con la mejor sonrisa y me dirijo a mi asiento pero estaba Jonas, para mi suerte estaba conversando con un compañero así que me senté al fondo a lado de la pared, a los segundos entro Theo siempre elegante con su corbata y a decir verdad primera vez que no le puse atención, sólo me limite a saludar, nos dio indicaciones de seguir escribiendo así que todos se pusieron a trabajar, realmente no tenía ganas de escribir así que me puse los audífonos, pero no pude escribir no podía dejar de pensar en mi padre, hasta que una lagrima salió de mi mejilla la limpie rápidamente, y miré hacia delante era Theo que me miraba con el ceño fruncido, no quiero dar explicaciones. pensé, así que empecé a escribir, pero no la historia, si no que una carta para mi padre así que abrí Word. 

Padre te extraño tanto, me gustaría que me vieras crecer, no es justo, sé que soy la hermana mayor, pero te necesito, no sabes cuanta falta me haces, si tan sólo vieras a mis hermanos y lo maravillosos que son, sé que no te han olvidado menos mamá, ella siempre le muestra tus fotos y les dice que los amas, que los cuidas desde el cielo, me rompe el alma saber que mi última vez que te vi, fue cuando decidiste partir.

Estaba escribiendo cuando una voz me quito de mis pensamientos

Theo: Bien chicos quedan cinco minutos, Señorita Arlett puede quedarse al finalizar la clase -me miró serio-.

Arlett: Ay no, que hice ahora, de verdad no tengo tiempo para aguantar a nadie -pensé mientras apagaba el computador-.

Arlett: Si, claro profesor-le respondí igual de seria-.

Pasaron minutos todos se marcharon Enzo se despidió de mi con la mano y yo lo imite.

Theo: Tome asiento-me dijo mientras me señalaba el asiento al frente del escritorio-.

Arlett: Profesor, con todo respeto no hice nada, no converse con nadie por favor no me llame la atención-le dije frustrada mientras me sentaba-.

Theo: Arlett, no pasa nada tranquila -me dice con una voz dulce-.

Arlett: Entonces, ¿qué pasa? -le pregunto confundida-.

Theo: Quiero saber si estas bien, te vi llorar en clases, necesitas algo, hay algo que pueda ayudar-me dijo con una voz suave-.

Arlett: No, profesor, aparte si le cuento me voy a poner a llorar. -le dije mientras me paraba en ese instante y él también se paró de su asiento-.

Theo: Arlett, ¿Qué pasa? -me dice preocupado-.

Arlett: Es mi padre, se cumple un año más que no está, lo extraño tanto, más enésima mi madre conoció a alguien y mis hermanos lo adoran, no es que no me ponga contenta, pero es que me gustaría que él estuviera aquí conmigo -le digo mientras las lágrimas caen por si solas. -Lo siento -le digo mientras limpio mis lagrimas-.

En ese entonces Mateo me envuelve en sus brazos, la verdad me asuste no pensé que reaccionaria así

Theo: Shhhh, tranquila no te disculpes por llorar-me dice mientras me acaricia la espalda, es raro todo, aunque estoy tan triste y me siento sola así que dejo caer mi cabeza en su cuello mientras las lágrimas caen, así estamos unos minutos él me abraza y yo lloro en su hombro.

Me aparto y veo su camisa la he dejado toda manchada de negro, Dios mi rímel esta esparcido en todo su hombro mojado claramente por mis lagrimas debo tener todos mis ojos negros y mi cara, me debo ver horrible.

Arlett: Lo siento mucho -le digo mientras trato de limpiar su camisa con mi manga.

Theo: Hey, está bien -mira me dice mientras saca su saco y se lo pone - ¿ves? ni se nota, sólo fue un lado -me dice sonriendo-.

Arlett: Lo siento mucho -le digo mientras bajo mi cabeza -en eso va a buscar algo en su maletín-.

Theo: Toma-me pasa un pañuelo que saco de su bolsillo-.

Arlett: Gracias -saco mi celular del bolsillo y me veo en el tengo todos mis ojos negros por el rímel así que me limpio con el pañuelo hasta que salga un poco lo negro-.

Theo: ¿Estás mejor? -me mira-.

Arlett: Si, profesor, muchas gracias la verdad desde la mañana estaba demasiado triste ,ahora estoy mejor -le digo con una pequeña sonrisa-.

Theo: ¿Y qué harás ahora? -me pregunta-.

Arlett: Quería ir al cementerio dado a que mañana salgo temprano del trabajo, así que creo que lo iré, total mañana es viernes -le dije mientras subía los hombros-.

Theo: ¿Y dónde está tú padre, en qué lugar? -me pregunta curioso-.

Arlett: la verdad está en un pueblito llamado los Arcos, él vivía hay de pequeño y siempre quiso descasar ahí -le dije con una pequeña sonrisa-.

Theo: ¿En serio? mi madre vive ahí pensaba ir a visitarla el fin de semana ¿Y si te llevo? así te acompaño para que no vallas sola, además, es lejos de acá puede ser un tanto peligroso siempre y cuando no te moleste -me dice con una sonrisa-.

Esa pregunta me dejo desconcertada, salir con mi profesor los dos solos, no creo que sea muy profesional de su parte.

Arlett: Profesor, no creo que sea correcto -le dije nerviosa-.

Theo: Si, es verdad, pero piénsalo así de verdad es peligroso que vallas sola además yo iré al mismo lugar podemos ser especie de "amigos por una tarde" además te ahorras los pasajes, en todo caso, sólo si quieres Arlett nunca te obligaría algo que no quisieras-.

Arlett: Esta bien, le diré a mi madre que saldré con Enzo o alguna amiga -le digo con una pequeña sonrisa-.

Theo: Estimada alumna, nos vemos el sábado, mañana me pasas la dirección por correo -me dice mientras me giña un ojo-.

Arlett: Okey profesor nos vemos, gracias por escuchar - le doy un pequeño abrazo rápido y me voy casi corriendo-.

Arlett que acabas de aceptar salir con tú profesor, por favor no te ilusiones ni nada, es un hombre mayor no se si tiene hijos, ni esposa, sólo será tu amigo por un día. ¡Ay dios en que me metí! -pienso mientras me dirijo al baño a limpiarme la cara.

PERMISO PARA ENAMORARME, PROFESORDonde viven las historias. Descúbrelo ahora