[Al Filo Tuyo] Ashley Graham X OC!Malereader

"Capítulo 5: Tifón"

Descargo de Responsabilidad: Resident Evil 2 y Resident Evil 4 Remake pertenecen a Capcom

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“Capítulo 5: Tifón”

“De prisa, De prisa, los corderitos escapan, traedlos a su purificación”

Malditos sujetos, eran bastantes que se acercaban a la iglesia, antorchas, trinches, machetes y hoces son las armas con las que venían.

—¿Qué hacemos?— oí la pregunta de Ashley que se encontraba asustada y no la culpaba

Son muchos, pero no tantos como los del pueblo cuando llegué, mientras no estuviera el Motosierra podría encargarme… pero

Ahora está Ashley en la ecuación y eso complicaba la situación entera. Debía también ver por su seguridad

La mire unos segundos mientras pensaba, pelear estaba descartado, solo me quedaba salir de la iglesia en silencio.

Otro problema, la única salida es la puerta principal y ya se están acercando eso conlleva a un combate que pondría a Ashley en peligro

Se me acaba el tiempo y las opciones
—Mira… tu padre confía en mi Ashley, y para que salgamos de aquí necesito que confíes en mí y hagas lo que te pido, por favor—

Mire a los ojos de la chica cuando dije eso, sabía que pasaría si no le daba la confianza y ahora no estábamos en la situación de jugar al búscame y ayúdame

¡Ahora entiendo cómo se sentía Claire con Sherry y conmigo!

Ashley algo asustada y tímida asintió
—B-Bien—

—De acuerdo—

Rápidamente saqué mi pistola y disparé al acertijo del Ventanal destruyéndolo, al hacerlo los barrotes regresaron a su posición original, eso nos dará algo de tiempo

Al mismo tiempo escuché como la puerta de la iglesia se abrió, me agache y Ashley hizo lo mismo. Esos desgraciados ya habían llegado

Me moví agachado hasta una parte, de camino en los libros encontré algo
—Creo que esto es tuyo—

Ashley tomó el celular y lo miró con una mueca
—¿Enserio? Lo acababa de comprar—

Reí levemente a su queja, llegué hasta un pasillo donde estaba una escalera hacia otro piso de la iglesia, pero la escalera estaba muy arriba para mí

—Ashley, necesito que te subas a mi y alcances la escalera— dije agachandome cerca de la pared dándola espalda

—¿Seguro?— me preguntó algo indecisa

—Si, está bien—

La chica subió a mi espalda, no iba decirlo en voz alta pero dolía. Me levanté lo suficiente para que se sujete de la escalera y subiera