ੈ✩‧₊˚ 🏁 𝗛𝗜𝗣𝗦 𝗗𝗢𝗡'𝗧 𝗟𝗜𝗘 ▬▬
. . . ❪ 𝖻𝗋𝗂𝖺𝗇 𝗈'𝖼𝗈𝗇𝗇𝖾𝗋 ❫ ✶
˗ˏˋ written by 𝗱-𝗱𝗲𝘀𝘀𝗲𝗿𝘁𝘀𝗼𝘂𝗹 ˎˊ˗
ೃ⁀➷ ✝️ 𓄼 ❝ but you didn't have to cut
me of, make out like never happen and
that we where nothing ❞
en donde A...
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(Sin editar).
ೃ⁀➷ ✝️ 𓄼
Habían ocurrido tantas cosas ayer que no tuve tiempo para procesar todo.
Luego de que Brian siguiera las órdenes de uno de los hombres de Tran y nos dirigiera al lugar indicado, el rubio bombardeó con preguntas que me marearon un poco.
Una vez allí, Johnny señaló nuestros errores. Después de la conversación entre Dominic y él, se marcharon; pero tras unas palabras más entre mi hermano y Spilner, regresaron y destrozaron el auto con una lluvia de balas.
El coche de Brian quedó desgraciadamente echo mierda, explotando finalmente bajo el impacto del nitrógeno y las llamas. No pude evitar burlarme de él directamente a la cara, y como si fuera colmo, la deuda que tenía con mi hermano seguía en pie.
Cuando regresamos a casa, Dom hizo un gran drama. Ninguno de nuestros amigos había venido en nuestra ayuda, lo que ofendió a Vince al ver que volvíamos con Earl.
Extrañamente, mi hermano lo defendió, afirmando que fue él quien evitó que termináramos en la cárcel.
El agua de la ducha cae sobre mí, empapando mi cabello y cuerpo. Respiro profundamente; mis hombros duelen tanto que hoy no tengo ganas de hacer nada, pero sé que debo.
Había prometido a León que lo acompañaría a una fiesta organizada por un amigo suyo. También íbamos a buscar algunas herramientas para mi coche.
Cierro los ojos, evitando que el agua pase entre ellos. Pasan los minutos mientras me ducho. Algunos golpes en la puerta me sacan de mis pensamientos, obligándome a salir antes de que me arrastren.
Envuelvo mi cuerpo en una toalla, el vapor sale rápidamente hacia el pasillo. Le sonrío inocentemente a mi hermano mayor, quién rueda los ojos y entra al baño, asegurándose de cerrar la puerta.
Me dirijo a mi habitación, tardando casi media hora en decidir qué ponerme para la dichosa fiesta.
──Oye, Aliyah. ── la voz de Mia interrumpe mis pensamientos. Levanto la cabeza, viéndola de reojo mientras sigo cepillándome el cabello.
Mia entra a mi habitación, examinando todo detenidamente. Sonríe al ver el cuadro que muestra a los tres juntos como adorno.
──No he tenido la oportunidad de agradecerte por cubrirme en la cafetería.──, dice con voz alegre. Asiento, intentando restarle importancia.
──No te preocupes, Mia. Ya sabes que me gusta hacerlo y, además, te lo debía.
