𝙱𝙰𝙱𝚈 🍼 𝙽𝚊𝚃𝚣𝚞

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Tzuyu llegó un poco apresurada al restaurante tras la llamada de NaYeon pidiéndole rápido que vaya. Estacionó y se bajó con su bolso en manos, vio a Tzuyu recargada en una camioneta un poco... vieja.

—NaYeon ¿Qué pasó?

—No me dejaron entrar porque supuestamente era una vagabunda.

La miró de arriba hacia abajo y suspiró, Im vestía unos jeans, camiseta blanca y una camisa de cuadro de abrigo.

—¿No dirás nada?

—Hablaré con los del restaurante, quédate aquí.

—¿Y luego entrar a un lugar donde no fui recibida solo porque no estaba contigo? No gracias—rodó los ojos.

—No sabía que esto iba a suceder...—se encogió de hombros.

—No iremos a ese restaurante, sígueme.

Im se metió a su a su camioneta y comenzó a conducir, Tzuyu frunció el ceño y se subió a su auto para comenzar a conducir detrás de NaYeon.

Luego de unos minutos siguiéndola, ambas estacionaron en un restaurante que para nada era el gusto de Tzuyu o bueno, un restaurante un poco diferente a lo que Tzuyu estaba poco acostumbrada a ir.

NaYeon tocó su vidrio y Tzuyu lo bajó-: ¿Vienes o no?

—¿Qué hacemos aquí?

—¿No es obvio? Charlar y comer.

Suspiró y subió el vidrio para luego bajar y cerrar todo con seguro, por si acaso.

—Ni que te fuéramos a robar-alzó una ceja.

—Se llama seguridad, Naycita.

Caminó dejándola atrás hasta que no supo donde entrar.

—Por aquí princesita.

Rodó los ojos ante el apodo y siguió a la otra chica, entraron a un restaurante más o menos formal.

—¡Hola Félix! ¿Tienes el menú?

—Hey NaYeon ¿Qué hay de nuevo? Aquí tienes.

—Gracias.

Ambas se sentaron, Tzuyu miró todo el local y sacó una toallita húmeda para limpiar la mesa.

—¿Qué haces?

—Desinfectando ¿no es obvio?

NaYeon rodó los ojos y miró la carta, luego se le extendió a Chou.

—¿Tiene Viatello Tonnato?

—¿Qué es eso?

—Comida italiana, duh.

Un chico llegó a su lado, sosteniendo un lapicero y una libreta en su mano.

—Un gusto, soy JeongIn ¿Ya tienen su orden?

-Sí, me das dos tteokbokki y carne, por favor In—el chico asintió, apuntando todo, Tzuyu quiso hablar, pero NaYeon se lo prohibió—.Eso es todo JeongIn.

—Gracias, en unos minutos le traemos su pedido.

JeongIn se retiró dejando solo a nuestras dos protagonistas, ambas se miraron de reojo.

—¿Y mi comida?

—No hay, así que conformate con eso.

Hizo un puchero y luego suspiró, esa chica la iba a sacar de quicio. A los minutos ambas ya estaban comiendo.

—Creo que deberíamos comenzar con lo básico ¿Cuántas años tienes?—habló Tzuyu, limpiándose cuidadosamente la boca.

—4×5+5.