the perfect family

Paulo 2

Al día siguiente del gran almuerzo y llevarme esa sorpresa fui con mi madre a ver vestidos de boda para ayudarle a escoger uno y ya después ir a buscar un vestido para mí

- mira Pau que tal este vestido

- cuando lo volví a ver quedé encantada era un vestido largo pegado al cuerpo formal - está hermoso si tú no te lo compras jurado que me comprometo y me lo compro yo

- ay Paula apenas tiene 17 años como te vas a comprometer y si claro que lo voy a comprar

- tú qué sabes y enserio está precioso
...

Después de andar de compras fuimos a cenar en familia a un restaurante - les soy sincera me vino bien esa comida ya que tenía mucha hambre pero tenía que llegar el idiota de Gabriel arruinar todo

- ya escogiste tu vestido Paula o vas a ir con el mismo tipo de vestido que usas para las fiestas

- me hubiera resultado quedarme callada pero lo que salió de mi fue peor - si Gabriel ya conseguí uno pero y tú vas a llevar a la boda a la chica que te cogiste en el auto de tu padre hace unas semanas

-  QUE HICISTE QUE GABRIEL

- Paula ya cállate un rato si

- y si no quiere Gabriel

- bueno ya mucho de ambos no sé que diferencias tengan en el colegio pero aquí se respetan y no hacen escándalos

- bueno me da igual, ma puedo ir a la pijamada de alis

- bueno ve pero con cuidado

- gracias - me levanté de la mesa y me fui feliz de la vida

Subo a mi habitación y empiezo a guardar todas las cosas que necesito para ir a la casa de mi amiga Alis. Una vez que tengo todo listo bajo y me despido de mi mamá.

...

- Hola Pau, entra que tenemos poco tiempo para arreglarnos - Alis y yo subimos a su habitación y nos empezamos a arreglar.

Yo me pongo un vestido negro, corto y pegado al cuerpo, me maquillo y una vez listas nos vamos a la fiesta.

- Paula, hoy me quiero emborrachar y besarme al primero que vea guapo - dijo Alis una vez que llegamos a la fiesta.

- Pues vamos a emborracharnos - caminamos a la cocina y empezamos a tomar, bailamos y seguimos tomando.

La verdad es que tome tanto que ni siquiera sé que hora es , perdí la cuenta de cuántos tragos tome, volteó a ver a mi alrededor y todo me da vueltas.

- Ven vamos a bailar- dijo Alis tomadome de la mano, caminamos hasta el centro y empezamos a bailar.

De la nada siento una mano en mi cintura y como alguien se pega cada vez más a mi, empiezo a sentirme incómoda e intento quitarlo pero el insiste.

Volteó a ver a mi alrededor y a lo lejos veo a Gabriel viéndome fijamente, quiero molestarlo así que empiezo a bailar con ese desconocido.

Tomo sus manos y las pongo en mi caderas, al mismo tiempo muevo mis caderas de un lado a otro, me doy la vuelta y veo al desconocido el acerca su boca a la mía y me besa, decido seguirle el beso, hasta que alguien me separa bruscamente del desconocido.

Sin darme cuenta estoy encerrada en una habitación con Gabriel, el me ve con mucho enojo, logré mi cometido, empiezo a reírme y no se porque no soy consciente de nada.

- ¿No que una pijama con Alis?

- Si lo es - le dije viendo cómo todo a mi alrededor daba vueltas.

- No sabía que las pijamas eran así, además, ¿quién era el idiota que besaste?

- No lo sé.

- Osea aparte de que mientes te besas a desconocidos.

- Si pero lo hice por que quería molestarte - nos quedamos callado viéndonos fijamente -¿Te puedo pedir un favor?

- ¿Que favor? - pregunta Gabriel con desconfianza.

- ¿Me puedes besar? - Gabriel abrió mucho los ojos y me vio muy sorprendido- Si te tranquiliza, mientras besaba a ese chico imagina que eras tú.

Gabriel no respondió nada solo me veía muy sorprendido, al ver que no tenía intenciones de besarme, decidí que yo iba a dar el primer paso.

Me acerco despacio y después por fin lo beso, el no hizo nada se quedó quieto.

Me sentí rechazada, me aleje avergonzada y le iba a pedir perdón hasta que el me tomo de la cintura y me empezó a besar.

Dios he estado esperando este momento por años y por fin está pasando, mueve sus labios rápidamente con los míos, pone sus manos en mi cintura y me pega más a el.

El beso se siente tan bien, lástima que después de unos minutos lo empuje y vomité encima de él.

- Mierda - escuché que dijo antes de caer inconsciente en sus brazos.