Décima parte.

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Pov Poché

- Estás bien?.- La voz de Santiago me sacó de mis pensamientos, una vez más como siempre que llegaba de viaje salíamos a cenar.

Según el era una manera de disculparse por estar tanto tiempo lejos, verdaderamente no importaba tanto, yo entendía, yo hacía exactamente lo mismo, ambos tenemos cosas que hacer y eso es normal en una pareja.

Eso fue una de las cosas de las que me enamoré, su atención y el tiempo de calidad que me brindaba aun teniendo mil cosas que hacer.

Pero no era suficiente, no sé compara nunca a lo que siento por Daniela, algo que nunca dejé de sentir y que ahora estoy recordando lo bien que me hacía. Una parte de mi se siente culpable por tener estos pensamientos aún estando con alguien que me ama, pero no puedo hacer otra cosa, por más que me obligue a no sacar a flote esos sentimientos no más aparecen y me tienen por completo.

Ahora lo que hago es sonreír y hacerle pensar a Santiago que todo va bien. Aunque todo verdaderamente va bien, hice las pases con Daniela y entonces sí, todo va bien.

- Lo estoy, estoy feliz además.- el sonríe haciendo que su nariz se arrugue y si ceño se frunsa un poco. El piensa que es por él, aunque si, una parte si es por él pero mi sonrisa ya tenía nombre.

- Yo también estoy feliz, feliz de tenerte conmigo mi amor...

Se acercó más a mi y dejó un beso en mis labios, los suyos eran tan suaves, besaba con una pasión que poco a poco me dejaba sin cordura. Pero no eran comparados a los de Daniela, que con nisiquiera tocarme ya me tenía loca.

Tengo que dejar de comparar a Santiago con Daniela, tengo que aceptar que ahora él es mi pareja y aunque me duela porque así lo decidí, Daniela y yo sólo podemos ser amigas. Nada más, no puedo permitirme nada más y creo que ella tampoco lo haría, por que la conozco y me conozco y sé que ninguna de las dos sería capaz de lastimar a una tercera persona.

- Voy a decirte algo y no quiero que lo tomes a mal o que te enojes...- me asusto, no sé que puede decir ahora.

- Sabes que no me gustan los rodeos, habla ya que de por sí, estoy nerviosa.- parecía que la cosa era grave, dios que estrés.

- Voy a tener que hacer un viaje de 3 meses... es demasiado urgente y salgo mañana mismo por la tarde.

- Cuando pensabas decirme?.

- Recién me enteré enante por la mañana amor...

- Santiago pero si nos casamos en menos de 2 meses...

- Lo sé amor, te juro que no quiero ir, pero el contrato que tenemos firmado es de los más grandes y si no voy terminaríamos en la ruina, y como sabes, más de la mitad de acciones me pertenecen y mi padre ya no puede hacer mucho...

- Entonces posponemos todo? Nos casamos cuando regreses? Eso es lo que querías decirme?.

- Sí amor, pero no lo tomes a mal... después de esto soy completamente tuyo...

- La cosa no es eso Santiago, y no es porque ya todo estaba planeado, sabes que a mi me vale y puedo terminar todo en un dos por tres, pero...

No dije más porque me cayó con un beso.

- Está bien, no diré nada más...

El solo ríe y me vuelve a besar.

Pov Daniela

Hace unos días había hecho las pases con Poché, habíamos quedado como amigas y por un momento pensé que estaba bien, que me conformaría con tenerla en mi vida aunque sea de esa forma, pero ahora mi cerebro, mi mente, todo, todo dice lo contrario, no podré ser solo su amiga, no cuando aún tengo ganas de comerle la boca cada que la tengo en frente, no cuando mi corazón late como loco a lo que mis ojos la captan en algún lugar, no podremos ser amigas porque aún sigo enamorada de ella.

The first date | Caché ; Se PausaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora