Nota. Tuve que reescribir varias cosillas en estos actos, ya que un par de interacciones no me convencían, en especial la aparición de un nuevo personaje.
III. Ver a través de la verdad
Variedad de platillos yacen alrededor de la mesa, algunos ya vacíos y amontonados. Una pieza de pollo es llevada a los finos labios del pecoso, una cucharada de arroz con verduras hace su camino y es tragado con rapidez; al otro lado, un muchacho ciego come con mayor calma y no parece un muerto de hambre como su mellizo.
—¿Un asesino de alquimista dices?
—En efecto, parece tener un patrón —asiente Law, levantando una de las hojas para ver la que yace debajo—, sus tres víctimas son antiguos combatientes del conflicto de Ishval.
—... Eso es un patrón raro —comenta Luffy, sentado a un lado de sus hermanos. Pero no hay ningún plato para él.
—Es lo mismo que piensa el coronel y el teniente coronel, lo único que queda es andar con cuidado. En especial ustedes dos, se han hecho una gran fama estos meses tras regresar a Central.
—No tendría sentido si ese asesino viene por nosotros —menciona Ace, su tenedor señalando el pecho del moreno.
Apartando con una suavidad particular la mano pecosa y pequeña a comparación de la suya propia, Law le da una mirada serena a Ace. Los dos hermanos por otro lado comparten una mirada confundidos por igual, ¿desde cuándo esos dos se acercaron tanto?
¿Será debido a aquellas escapadas nocturnas de Ace?, se cuestiona Sabo, llevando una mano a su barbilla.
—Tal vez aquello rompería el patrón que poseemos ahora, pero nunca está de más ser cuidadosos, enano.
—¡¿Cómo me has llamado?!
La puerta de entrada es abierta y el teniente Marco ni siquiera se ve sorprendido por la escena dentro, un pecoso de baja estatura aprisiona el cuello del moreno mientras que las manos de esté jala la trenza azabache y pellizca una mejilla pecosa respectivamente.
—Sargento primero, se le requiere en una reunión de suma importancia —informa Marco, saludando con calma al pequeño de los hermanos que ha agitado contento su mano en dirección a él.
—... Comprendo, iré enseguida señor.
Un quejido escapa de los labios de Ace, tras recibir una fuerte palmada en su nuca por parte de Law. Tras los subordinados de Shanks retirarse, los hermanos vuelven a su antigua plática.
Los tres tranquilos y sin preocupación alguna.
Se confiaron demasiado.
Caminando bajo el cielo nublado, el mellizo de ojos zafiros nota la mirada apagada de su hermano, puede sentir que hay algo en su mente que lo mantiene demasiado distraído y no le agrada eso, el hecho de que le oculte sus preocupaciones.
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𝐋𝐚 𝐭𝐞𝐨𝐫𝐢𝐚 𝐝𝐞𝐥 𝐜𝐚𝐨𝐬
Short StoryUna historia de la vida de los hermanos Portgas, las consecuencias que sus acciones les trajeron ante su pecado cometido. ¿Pero somos capaces de juzgarlos? Uno por amor es capaz de hacer cualquier cosa, incluido aquello que está prohibido. OP Story...