Los médicos se encontraron impotentes ante la situación. La belleza de aquella joven se desvaneció y la tristeza la consumió por completo. Supergirl la buscó incansablemente, moviendo cielo y tierra, pero ella ideó un plan para mantenerse alejada. No quería que su esposa presenciara el terrible suceso que la había transformado. El sacrificio de salvar a la humanidad la llevó a ocultarse en los rincones más oscuros junto a Alexander, reviviendo día tras día la tortura que la aquejaba. Sin embargo, una noche, aceptó que todo debía llegar a su fin. No tenía más fuerzas para seguir adelante. Tomó su teléfono y marcó un número que, solo de pensarlo, infundía miedo.
- Kara, tenemos que hablar. -
Fue lo único que pronunció, para luego enviar la dirección de su oficina, ubicada a escasos pasos del lugar donde su hermano había cometido sus atrocidades. Sin perder tiempo, la rubia acudió a su llamado. En ese preciso instante, la oscuridad se desvaneció y Lena, con una claridad deslumbrante, reveló su verdadero rostro. Lena estaba desesperada por poner fin a esa situación. Encendió las luces y avanzó lentamente hacia su amada, pronunciando con una voz cargada de genuina tristeza:
- Lo siento tanto. - Kara quedó paralizada al contemplar la máscara que ocultaba el rostro de su esposa. Inhaló profundamente, acercándose aún más para retirarla, revelando una horrenda cicatriz que cubría su rostro. ¿Dónde estaba aquella belleza que una vez la cautivó? ¿Dónde se encontraba aquel rostro angelical?
Lena, con una expresión de sincero pesar, dijo:
- En serio, lo siento.- Lamento profundamente todo esto. No quería convertirme en un monstruo. Acto seguido, iluminó la habitación con luces de un verde intenso, conocido por todos como kryptonita. La ojiazul soltó un grito de dolor al caer al suelo, consumida por la intensidad de la radiación. La azabache, con un beso en los labios de su amada, se levantó y la dejó agonizando en el suelo. Luego, se dirigió a su asiento y abrió el cajón de su escritorio. Sin pensarlo dos veces, tomó un arma. Sabía que debía poner fin a todo esto. Los gritos de Kara resonaban en la habitación segundos antes de que Lena apagara las luces, habiendo apretado el gatillo y dejando a la heroína libre de aquel acto que la había mantenido inmóvil.
Lena había soportado en silencio durante demasiado tiempo, consciente de que los médicos no podían hacer mucho para ayudarla. La reconstrucción de su rostro solo dejó una cicatriz imborrable, un recordatorio constante de las atrocidades que su hermano había cometido para castigarla. Aquella tortura resultó abrumadora para ella, y los traumáticos eventos de aquellos días la habían atormentado sin descanso mientras permanecía oculta. El día en que decidió reunir el coraje necesario para poner fin a todo, volvió a encontrarse con la persona por la que una vez soñó con una vida diferente: su esposa. Sin embargo, al quitarle la máscara, sus ojos se encontraron con una cicatriz que ella consideró horrenda. Esto solo reforzó su determinación de seguir adelante con su plan. Se despidió de Kara y, con su propia mano, se arrebató la vida.
La heroína, ahora en el suelo, gritaba de dolor, repitiendo el nombre de Lena una y otra vez. Después de unos minutos, decidió que ese lugar ya no era digno, no para Lena. La levantó en brazos y la llevó por el pasillo, alejándola de allí. Antes de salir por la puerta, Lex se acercó a los barrotes y le gritó, finalmente declarando que todo había terminado y que ya no podía retroceder en el tiempo, habiendo perdido todo.
Kara: Este no es el final, no para nosotras.
¿Quién había sido el juez de aquel destino tan vil que había perturbado la vida de todos? Nadie lo sabía. Tanto Diana como Bruce no pudieron soportar el peso de saber que la humanidad ahora los veía de manera diferente, y dejaron de protegerla. Ya no servían como los seres que inspiraban esperanza. Superman, el más grande de los héroes que jamás existió, fue detenido por la DEO, encadenado y custodiado para evitar que su locura, nacida el día en que perdió a su familia, lo impulsara a destruir todo lo que tuviera vida en el mundo. Ahora, Supergirl era la única en quien el mundo aún tenía esperanza. Después de encontrarla, la había perdido. Se aferraba a la idea de que eso no podía ser verdad, no podía aceptar que ella hubiera muerto. Así que buscó a Flash y le pidió su ayuda para revertir el tiempo. El héroe tenía el poder para hacerlo, para ayudarla. Ella podía corregir todo y evitar que Lena pasara por esa terrible situación.
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Juez.
FanfictionEn un mundo donde el mal y la venganza amenazan la paz, Supergirl se encuentra en una encrucijada emocional cuando, Alexander Luthor, escapa de prisión. Con una mente brillante y retorcida, Alexander busca destruir a los héroes más poderosos del mun...