Capítulo 1: Depresión y/o ansiedad: ¿cómo dejarlas atrás?

9 0 0
                                    

Disclaimer:
Antes que nada quiero aclarar que NO SOY NINGÚN PROFESIONAL RESPECTO AL TEMA, ESTO ES PARA ENTRETENIMIENTO DE LOS LECTORES, y lo hago con la genuina intención de que pueda ayudarles en algo, aunque sea un poco, hacer un aporte positivo a sus vidas. Si estás leyendo esto significa que decidiste darte y darme una oportunidad: a mí de ayudarte, y a ti de avanzar hacia algo mejor.
Quiero que comiencen a leer la primera historia, y bueno, las siguientes que vendrán si así lo desean, con la absoluta convicción de que su fuerza de voluntad mueve montañas, propóngase en serio aquello que deseen llevar a cabo, elaboren un plan para darle continuidad, siéntanse felices y realizados de saber que pueden lograr cualquier cosa. Ahora sí, gracias infinitas y bienvenidos nuevamente ❤.

Para darle solución a algo tenemos que entenderlo y para entenderlo tenemos que saber qué es.
La depresión es un trastorno mental caracterizado fundamentalmente por un bajo estado de ánimo y sentimientos de tristeza.
NO ES LO MISMO QUE LA ANSIEDAD, pero pueden ir de la mano.
La asiedad se caracteriza por una preocupación y miedo intensos, excesivos y continuos ante situaciones cotidianas. Es posible que se produzca taquicardia, respiración agitada, sudoración y sensación de cansancio.

Si estas leyendo esto, por el motivo que sea, te identificas con estos conceptos, y estás dispuesto a mejorar tu calidad de vida, permíteme decirte que el primer paso es reconocerlo. Admitir que sufres de ansiedad y/o depresión requiere de valentía, determinación y fuerza de voluntad, pero no para quedarte ahí, sino para tomar acción al respecto y cambiarlo.
Y con esto me refiero a quien en serio lo padece, porque desgraciadamente se ha propagado la incomprensible "moda" a mi humilde parecer de tener estos trastornos. Si tú estás inconforme con algún aspecto mínimo de tu vida, haz lo posible por arreglarlo, pero no te ahogues en un vaso de agua, más bien agradece lo que tienes y las cosas buenas que puedes rescatar de tu vida. Por más simples que parezcan, siempre están. Solo es cuestión de saber observar. Pero por favor: NO NORMALICEMOS LA INFELICIDAD. Todos merecemos algo mejor.

Ahora bien, para arrancar un mal de raíz, investigamos su causa ¿verdad?, algunas de estas (a modo general) pueden ser:
- El estrés y la presión en el trabajo, el colegio o la familia.
- Problemas con la pareja.
-Experiencias vitales traumáticas, como malos tratos o una catástrofe natural.
-La genética y los antecedentes familiares de trastornos mentales (hay tendencia en la familia a estos trastornos).
* aclaro: todos en algún momento podemos padecer cualquiera de estos males, en mayor o menor escala, si estamos hablando de un caso crónico lo mejor es acudir a un profesional.
-Elecciones de estilo de vida poco saludables, como falta de sueño, mala alimentación o falta de ejercicio.
Esos son solo algunos aspectos que te pueden servir como guía a la hora de indentificar la raíz del problema. Pero si no terminas de entenderla, a continuación una pequeña instrucción:
- ¿En qué situaciones se provocan las sensaciones?. Hazte consciente en el momento en que sientas pánico, ansiedad, miedo, tristeza profunda, etc.
- ¿Qué tienen estas en común?.
Un ejercicio muy efectivo que te voy a recomendar es el de la "Gestión Emocional", como yo lo llamo; no es más que identificar la emoción en el momento que se produce.
Sentirla, simplemente dedicar un espacio a ella, permitirle invadirte (sin tomar acción contra nadie ni contra ti mismo, es un ejercicio de observación en el que debes ubicarte en una posición neutral, como la palabra lo dice, como un "observador"), ahora pregúntate:
¿En qué parte de mi cuerpo la siento?
¿De qué color la siento?
¿Qué me dice, qué me pide?
Después de analizar todo esto, pregúntate de manera sincera y abierta contigo mism@ ¿qué necesitas?. Pregúntalo 2 3 4 y hasta 5 veces, las que sean necesarias para que tu mente ceda paso a tus verdaderas emociones y logres conectar con lo que en realidad necesitas.
Cabe resaltar que para hacer esto debes estar dispuest@ a dedicarte tiempo a ti mismo, primero tú, luego lo demás. Tal vez más adelante cuando hayas hecho de esta práctica un hábito puedas hacerlo en momentos determinados sin tomarte mucho tiempo, pero para empezar es importante concentrarte en ti.
Si por ejemplo te invade la ansiedad y angustia cuando escuchas mucho ruido, gritos, o en ambientes hostiles, sientes que se te aprieta el pecho o que no puedes respirar, es posible que lo que necesites sea paz, porque la raíz del problema sea algún tipo de trauma infantil que te está afectando en el presente y es necesario sanar.

Una vez que identificamos cuál es ése problema, es cuando empieza verdaderamente el "trabajo". Tenemos que hacernos responsables de lo que sucede y buscar soluciones para ello.
(Si te gustaría que hiciera otro capítulo hablando específicamente de algún problema con gusto lo puedo hacer. Estaría encantada de ayudar. Solo contáctame y haz la sugerencia <3).
Otro aspecto verdaderamente importante es el hacernos plenamente conscientes e instalar en nuestras mentes el ferviente conocimiento de que
NO somos nuestros pensamientos, NO tenemos que identificarnos con ellos. Tampoco somos nuestras emociones.
Somos nuestras elecciones, así como aquello en lo que ponemos nuestra energía, pero la buena noticia es que ¡tú decides cómo quieres ser!, ¡cómo expresarte en el mundo!. Desgraciadamente no nos enseñan a conocernos a nosotros mismos, pero nunca es tarde y a partir del autoconocimiento podemos entonces elegir aquello que queremos proyectar (pero ya ese es otro capítulo ;)).
Asi que no te sientas culpable por lo que pienses o lo que sientas, solo aprende a gestionar tus emociones y pensamientos. Una manera de empezar es el ejercicio que te compartí sobre la gestión emocional. Respecto a los pensamientos, el foco de mira está en el dialogo interno: ¿qué es lo que consciente o inconscientemente te dices a ti mism@?. Para esto y para dar solución al problema inicial te propongo las siguientes acciones concretas:
- Cultiva el amor propio, ¡es la base de todo!
- Haz ejercicio físico. Agrégalo a tu rutina como un hábito, aunque sean 20 minutos.
- Medita. Sí, sé que para los que nunca lo han hecho resulta raro, pero si lo intentas poco a poco notarás como esto te ayuda a mantenerte presente y concentrado. (Esto particularmente ayuda en la observación del diálogo interno)
- ¡Escribe!. Tener un diario donde puedas desahogarte, escribir tus pensamientos, cómo te sientes etc ayuda muchísimo (ojo uno FÍSICO, no es igual que uno virtual)
- Intenta mejorar tu alimentación, comer las comidas necesarias en el día (desayuno, almuerzo, y cena).
- Bríndale atención a tu cuerpo, dale lo que te pide.

Recuerden siempre por favor, que no podemos controlar lo que sucede, pero sí que podemos controlar nuestra reacción ante ello.

Espero de todo corazón que esta información te sea de ayuda.
Tal vez ahora parezca muy difícil llevarlo todo a cabo, pero, te prometo que con empeño y haciendo uso de la fuerza de voluntad que posees es posible hacer un giro de 180 grados, y puede que hasta de 360 ;).
Hay mucha información a tu disposición en plataformas como YouTube o también en libros.
Aqui te dejo un artículo que quizás te sea de ayuda:
¿Cómo afrontar la ansiedad? - Cinfasalud https://cinfasalud.cinfa.com/p/ansiedad/

Les pido por favor, además, que si conocen de alguien a quien este escrito le pueda ayudar lo compartan con esa persona. O en otras plataformas, ¿quién sabe? a veces desconocemos quien puede estar necesitando nuestra ayuda.

Gracias por leer, nos veremos en la próxima aventura ;),

AquarianGirl

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Oct 05 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Un rincón para encontrar el arcoiris en lugar de nubes negrasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora