𝕽𝖊𝖕𝖚𝖙𝖆𝖙𝖎𝖔𝖓 (Pedro Pascal) [TERMINADA]

03. TOCAR EL CIELO

TOCAR EL CIELO
━━━━━ ☾☽ ━━━━━
JAVIER PEÑA

El olor a cigarrillo se impregnaba en su piel. La esencia del alcohol en sus fosas nasales.
La música alta producía un leve dolor de cabeza, pero bastante tolerable para soportar por unos minugos más.
Su capacidad para atender cada detalle se encontraba al máximo.
Javier suspiraba con pesadez mientras bebía de su trago, aquello parecía ser lo único que calmaba aquella ligera ansiedad, aunque este no lo demostrara.

De vez en cuando miraba a su alrededor, solo para asegurarse de que todo estaba en orden, al menos hasta que todo estuviera perfectamente acomodado. El pelinegro miró a su compañero a unos metros de distancia, quien asintió, confirmando que era tiempo de actuar.
Este suspiró antes de beber hasta la última gota de alcohol, saboreando los restos en su paladar, y caminó sin más hasta la parte exterior de aquel establecimiento, a medida que sus piernas avanzaban, la luz comenzaba a ser tenue hasta perderse en la oscuridad.

Con cautela, comprobó que el arma tras su espalda aún se encontraba, por lo que tomó el picaporte con cuidado para permitirse mirar dentro de aquella habitación.

— Preciosa — murmuró con aquel sutil acento, antes de sentir los brazos de su amada rodearlo con fervor.

No hubo tiempo de más explicaciones, ambos se fundieron en un apasionado y  necesitado beso mientras sus manos trataban de hallar aquella tranquilidad que tanto anhelaban.

— Tenemos que irnos — mencionó intentando suprimir todo rastro de preocupación. La chica asintió antes de tomar su mano, pero no podía negar que aquello le atemorizada de sobremanera.
¿Estaba dispuesto a arriesgarlo todo por una mujer que había conocido semanas atrás pero que sobretodo, era el principal vínculo de su peor enemigo?.

Javier siempre supo que aquella mujer sería su perdición pero, haber probado aquellos labios y piel, lo había hipnotizado sin marcha atrás.

— Pablo... — murmuró la joven, con temor. Era claro que el miedo carcomía sus entrañas y ser la mujer de Pablo Escobar la ponía en el ojo del huracán.

Encontrarse a Javier fue la llave al paraíso, no tuvo que hacer mucho, aquella conexión que se creó desde el primer momento en que se miraron fue lo suficiente como para considerar aquel escape que necesitaba para, por fin, alejarse de aquel ser abominable.

— Estaremos bien — comentó Javier antes de besar su frente y apretar su mano de manera reconfortante.

Pero, no todo siempre salía bien.

Las sirenas confirmaban aquella operación antes de tiempo, antes de que ambos pudieran salir, infiltrados del lugar y todo se convirtiera en caos.
Bastaron dos minutos antes de que todo el lugar se infestada de ensordecentes disparos.
Javier tomó con fuerza la mano de la joven antes de tirar de ella y caminar por los pasillos, con prisa, lo que volvía el ambiente desesperante y frío.

Las risas escandalosas parecían haberse convertido en lo favorito de Javier, sobre todo si venían de la voz de aquella mujer que se había robado hasta su último aliento.

— Para... — murmuró la chica al sentir los labios de su amado recorrer su piel
— me haces cosquillas — rió antes de dejar escapar un suave gemido.