one "short's" -Roronoa Zoro

Hermosos momentos

Luego de un largo viaje, encontramos una isla. Nami repartió el dinero entre todos (haciendo un poquito de trampa) y nos dirigimos a hacer compras en las tiendas. Entre chicas fuimos a la tienda de ropa. Robin y Nami querían que yo usara ropa más escotada, así que estuvieron escogiendo por mí.
Un vestido escotado, muchas bikini, y ropa interior... ¿Eso también? ¿Tenía que ser tan finita? Está bien, para verme.. a la moda.
Salimos de la tienda, yo me dejé puesto el vestido, íbamos cada una con sus bolsas de ropa, aunque la de Nami... Era demasiado grande, por suerte nos hicieron un gran descuento.

Tn: Robin! -le susurré cuando Nami se nos apresuró - ¿Crees... Que éste vestido que tengo puesto... Le guste a Zoro? Es verde, ¿Se dará cuenta que lo elegí pensando en él?

Robin: Tranquila, no creo que piense eso, aunque si están muy pegaditos... Parecerán esposos. - Robin se reía pensando la situación - ¿Y tú qué opinas? Este vestido celeste... ¿Él se dará cuenta?

Tn: Seguro solo dirá "¡Nos vemos súper geniales con el celeste!" o quizás "¡Nos vemos como una súper pareja!".

Robin: Eres tan tierna, ojalá esto funcione y cuando tengamos hijos con ellos, nuestros pequeños sean amigos.

Tn: Robiiiin!! No digo que sea mala idea... Pero ya pensante en hijos...? Ahora que lo pienso bien, que lindo sería...

Llegamos a una librería, y dejé a Robin, ya que ella se toma mucho tiempo ahí, la dejaría sola, y aproveché a pedirle algunos libros de mi parte.
Me dirigí a la juguetería, me gustaría encontrar algo para Zoro, seguramente algo pequeño, para no ser tan apresurada. Me dirigí a la zona de muñecos, no encontraba cosas pequeñas y lindas para él, pero me llamó la atención un osito, era un poco grande, verde, tenía un pañuelo para la comida, una cuchara en su mano izquierda y una en la derecha, y extrañamente... Una cuchara que sostenía con la boca. Era perfecto para él, pero... ¿Y si se lo toma mal? Podría pensar que estoy loca por él (lo estoy) y odiarme, ¿Qué haría si Zoro, ése hermoso espadachín, mí nakama, me odia?

Estaba sumergida en mis pensamientos, sosteniendo el peluche entre mis manos, hasta que unos golpecitos en el hombro me asustaron.

Era Zoro, a uno centímetros más alto que yo, y unos pocos más lejos.
Dí un pequeño grito por el susto... Pero, ¿Qué hacía él aquí?

Tn: ¿Zoro? ¿Qué haces aquí?

Zoro no dijo nada, y bajó la mirada al peluche que aún sostenía entre mis manos ¿Habrá notado el parecido? Mi vestido verde, el peluche extrañamente parecido a él, y el estar tan pensativa.

Zoro: ¿Tú también?

¿Yo también?

Tn: ¿A qué te refieres?

Zoro: ¿Viniste a comprarme un peluche a mí? ¿Y te pusiste ese vestido pensando en mí?

No sabía si estaba enojado o no, no lo alcanza a ver bien por lo cerca que estaba y lo alto que es.

Tn: Yo... La verdad, el vestido es una coincidencia... Y el peluche... ¿Qué hay de malo? Somos nakamas... Obviamente me pareció divertido el parecido.

Zoro: ¿Segura? Es una lástima. Yo sí vine a comprarte un peluche a ti.

Lo decía con tanta seguridad que no se sabe si es mentira o no.

Tn: ¿Que quieres decir?

Zoro: Te lo preguntaré otra vez, ¿Fue intencional? ¿Pensando en mí?

Yo... Ya no puedo.

Tn: ¡Si! ¡¿Y qué?! ¿No puedo? Siempre te pienso, a veces no puedo dormir por pensarte. Quería que te pareciera lindo éste vestido, y quería regalarte un muñeco, si. ¿Qué? ¿Me odias? Está bien, trataré de no molestarte, pero comportate profesional y no hagas que esto afecte a la tripulación.

¿Qué? ¿Qué me pasó? ¿Por qué dije todo eso? ¡Ay! ¡Soy una idiota! ¡Me matará! ¡Le va a contar a todos en la tripulación y será una humillación! Debería pensar en escapar

Zoro: A mí también me gustas.

Tn: ¿Qué?

Zoro: Dije que a mí también me gustas, sorda.

Tn: ¿Oí bien? ¿Te gusto? ¿Yo?

Zoro: Si, y oír que yo también te gusto, y como lo dijiste... Yo... También vine a comprarte un peluche... Es... Un gatito, ¿Te gusta?

El peliverde mostró un gato de peluche y lo puso entre sus manos, al frente del que yo tenía.

Tn: Zoro...

Zoro: Me gustas, Tn.