Maki On Our Ship [K x Taki] Kki

Cinco

Ese día Takasahi estuvo en la empresa con el alfa. Vio al pequeño y adorable Harua que le habló a su pancita, y cuando finalmente K le avisó a Nicholas que ya había terminado por hoy, salieron rumbo al hospital.

Hoy tenía un ultrasonido y algunas revisiones pendientes tras haber cumplido los 6 meses de embarazo.

[⺌마키！ ヾ]

Finalmente habían podido reconocer el sexo. Taki cargaba en su pancita a un niño perfectamente sano.

Yudai no había entrado a la consulta ya que él insistía en enterarse el día del babyshower.

Fue por ello que Riki salió en silencio y caminaron hasta el aparcamiento.

── ¿Y? ¿Cómo fue todo? ──preguntó algo ansioso.

── Todo está perfecto ──respondió con simpleza sentándose en el asiento de copiloto, viendo al alfa haciendo muecas, claramente le picaba la curiosidad por saber.── ¿Quieres saber el sexo? ──

El menor le movió las cejas, sonriéndole divertido. Koga negó eufórico.

── No me lo digas ¡No me lo digas! ──

El omega se carcajeó, viendo al mayor encender el auto para ponerse en marcha.

Sólo pasaron 20 minutos hasta que Yudai volvió a hablar.

── ¿Es un niño, verdad? ──

[⺌마키！ ヾ]

El babyshower fue organizado por la madre del alfa. La verdad la fiesta fue  muy agradable y a la hora de revelar el sexo K colapsó a pesar de que desde un inicio el tenía esa noción de que sería un niño.

Tomaron muchas fotos y disfrutaron mucho con sus amistades.

── Y le voy a comprar un auto de juguete totalmente funcional que pueda conducirlo yo desde un control remoto ──murmuró emocionado.

Aunque más bien parecía estar haciendo planes solo.

── Y cuando sea más grande le enseñaré a jugar al fútbol ──decidió.

Taki lo escuchó cuando salió de tomar una ducha luego de sacarse la pintura azul de la pancita, esa que habían usado para escribir Maki, e indicar que se trataba de un niño. Estaba un poco cansado luego de babyshower, así que se quedaría hoy en la casa del alfa.

── Amor, ¿ya estas listo para ir a casa? ──preguntó el alfa tomando desprevenido al que estaba a subiéndose a la cama luego de haber levantado el edredón.

── ¿Qué? ──se quedó ido.── Creí que yo... Está bien, ya estoy listo ──sin más se bajó del colchón, y no pudo evitar la reacción instantánea de su cuerpo.

Él hizo un puchero y miró al suelo con una gota de decepción.

Pero bueno. Si Yudai lo quería llevar de vuelta no podía interferir. Esta era la casa del alfa, no podía quedarse si el otro no quería.

Lo vio reírse con ternura.

── Amor, iremos a tu casa, pero no para que yo te deje ahí ──le explicó acariciando su mejilla.── Iremos a buscar tus cosas. Creo que debíamos vivir juntos desde hace un tiempo la verdad ──