Hoy la muerte ha derramado una lágrima
Una lágrima amarga,
Sintió pena al verme
Sintió pena al ver mis ojos fúnebres.
Te esperaría días, meses, años, y mucho más;
El inicio de los inviernos, el fin de las primaveras.
Te esperaría un otoño sentado sobre el mismo roble,
El roble donde pactamos nuestro amor con un recuerdo.
Río de lagrimas, pesa el cuerpo sobre el alma,
Y mi alma cansada ya está de tanto recordar,
Recordar recuerdos donde no hubo nada
Pesa el alma sobre el cuerpo, pesa mi amor al recordar.
Aquí yace tu nombre, sobre las rosas más hermosas,
Sobre la seda más fina, sobre el cielo infinito
Sobre mi pecho; sobre este niño sin cobijas
Que espera tu regreso.
Qué difícil sería decir un te amo, cuando ella no lo quiere escuchar
Dulce café de leche, tus ojos de color,
Brillantes hilos dorados brotan por tu mejilla al caminar
No tan radiantes como tu sonrisa de mar.
Dulce amada mía, yo no te quiero juzgar
Solo quiero que entiendas
Lo que no supe expresar.
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La supervivencia del poeta
PoetryTe escribiré 365 cartas antes de que mi mundo desaparezca, antes que me olvides... Te amaré por siempre