Matrimonio Forzado (Omegaverse)

Capítulo 1

Noa se encontraba jugando en el jardín y a su lado estaba su madre, ella era hermosa tanto que parecía una estatua, Noa intento que su madre le prestará atención - ¿Mami por qué no juegas conmigo? - su madre lo volteo a ver con unos ojos vacíos y frotó su cabello, era la única muestra que siempre recibía de ella.

- Joven amo es hora de entrar, vaya entrando, yo llevaré a su madre. - la madre se encontraba mentalmente inestable.

De repente Noa abrió los ojos, había tenido un sueño, no era ni bueno ni malo solo era un sueño.
Se dio cuenta que eran las 5 de la mañana, todavía tenía las palabras que su padre y su madrastra, no sabía si era algo bueno casarse con un extraño o si debería pensar en una forma de huir pero a dónde iba a ir si no tenía nada ni a nadie.

Sabía que tenía que empezar a alistarse ya que si no lo hacía iba a ver consecuencias.

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Noa salió de la ducha y encontró en su cama una caja de marca en su interior encontró un conjunto delicado para un Omega no sabía si sentirse ofendido ya que nunca había usado este tipo de ropa, pero al ser un Omega debía de usar, al final de la caja pudo encontrar un collar para proteger su cuello, ya que sin este podía correr peligro si se llegaba a encontrar con otros alfas.
Noa suspiro, esto era algo nuevo para él, habían dado clases explicando los géneros y subgéneros las pro y las contras, pero eran más contras para los omegas. Noa alzó el collar a la altura de su cuello, no podía negar que el collar de color negro con incrustaciones de diamantes era algo elegante, no pensó que su padre se preocuparía tanto por vestirlo tan bien,  eso significaba que lo iban a casar con un pez gordo. Noa se puso el collar, era algo incómodo pero lo podía soportar.

Estaban dando las 9 cuando alguien tocó la puerta era una de las empleadas avisando que ya era hora de bajar ya que sus padres lo esperaban, Noa solamente asintió y bajo.

Habían llegado a la recepción de un hotel donde en la planta alta había un restaurante.
El trayecto hacia allá fue incómodo tanto en el automóvil como en el elevador no se dirigieron ni una sola palabra, salieron del ascensor donde una empleada los dirigió hacia una zona VIP, era una habitación privada, la empleada abrió la puerta y solo habían dos asientos, Noa se sorprendió ya que esperaba conocer a mis padres del novio.
Su padre le dijo que pasará y esperara, ellos iban a estar en una habitación al lado.
Noa solo obedeció y bajo la mirada, de nuevo le invadía el sentimiento de angustia y temor.
Escuchó que la puerta se abría y alzó la mirada tan rápido que sin previo aviso sus ojos se cruzaron con los de un hombre alto y apuesto.