Build
Cinco años después
Dejar mi diario abierto donde mi marido lo encontrará se ha convertido en uno de mis pasatiempos. Cuando descubrió las fantasías que había escrito sobre él cuando tenía dieciocho años, inmediatamente regresamos a casa y comenzamos a representarlas.
Una a una.
No es de extrañar que ya tengamos dos hijos: Boss, Dan y un tercero en camino: Paris. Y claro, nuestros hijos perrunos: Simba y Maylo.
Mi marido no puede pasar un día sin estar dentro de mí, a menudo varias veces. Sin hacerme el amor frenético y desordenado donde quiera que estemos en la casa, nuestros gemidos resonando con fuerza por los interminables pasillos.
Sí, los pasillos son largos, pero ya no están vacíos, oscuros ni solitarios. Son brillantes y llenos de ruido. Las risas de los niños, la música … y las peleas de mi familia que vienen y se niegan a irse hasta que me veo obligado a echarlos, generalmente en un ataque de risa. Sin embargo, no tienen que ir muy lejos, ya que Bible les construyó una casa en las afueras de nuestra propiedad.
Fiel a la palabra, mi marido se ha convertido en un hombre de familia. Un hombre que trata a los demás, especialmente a sus inquilinos, con amabilidad y compasión. Tanto es así que apenas puedo recordar al hombre cerrado y distante que solía ser.
Lleva a mi padre y a mis hermanos a pescar, envía a mi madre y a mi abuela a extravagantes viajes de compras, a Simba y Maylo los lleva con nosotros a los viajes de familia, les compra tanta ropa linda y tierna y en cuanto a sus hijos... nunca ha habido un padre más devoto y amoroso.
Puedo oírlos ahora mismo, chapoteando en la piscina para niños que Bible ha instalado en el patio trasero, ya que la interior era demasiado profunda para los niños. Él los está entreteniendo mientras yo reviso los pedidos de suministros para Build's Secrets, el negocio de diarios personalizados que comencé hace poco más de cuatro años con el apoyo de Bible. Solo acepto una pequeña cantidad de pedidos cada mes y los elaboro yo mismo teniendo en cuenta la personalidad del cliente. Hace un tiempo, una celebridad hizo un pedido y su publicación sobre el diario se volvió viral, lo que hizo que mis creaciones tuvieran una gran demanda.
Estoy viviendo mi sueño. Más feliz de lo que sabía que era posible.
Mi trabajo del día ha terminado y ahora estoy escribiendo un poco en mi diario, acurrucado en mi oficina del segundo piso, todavía usando mis bragas rojas de un baño anterior y mis pies metidos en mis pantuflas.
El sonido de las risitas de mis hijos gemelos sube las escaleras y me muerdo el labio, termino la entrada de mi diario con un movimiento de mi bolígrafo, lo dejo y me giro para saludar a los tres hombres de mi vida. Cuando llegan a lo alto de las escaleras, la atención de Bible se centra en el diario y sus ojos se oscurecen, los músculos de su pecho desnudo se flexionan con anticipación.
“¿Escribiendo un poco, ángel?”
Me muerdo el labio y asiento inocentemente. "UH Huh."
Su voz se hace más profunda. "Parece que es hora de la siesta".
Los niños se quejan, como siempre lo hacen, pero Bible los convence de que agachen la cabeza y cierren los ojos, mientras Maylo y Simba suben con ellos a la cama para su siesta tambien, tras lo cual todos se duermen rápidamente después de una tarde chapoteando en la piscina. Y luego está de vuelta en la puerta de mi oficina, examinándome con una expresión lobuna.
Con aire de indiferencia, me levanto y me alejo de mi escritorio, dejando “accidentalmente” el diario abierto para que él lo lea. Bible entra a la oficina, cierra la puerta detrás de él y toma el pequeño libro encuadernado en cuero, su respiración se entrecorta casi de inmediato. Claro que lo hace.
Recuerdo lo que escribí, palabra por palabra.
Espero que papi venga a buscarme hoy.
Espero que estemos solos.
Se siente tan bien cuando me toca.
Quiero ser su niño para siempre.
Pero también quiero que finalmente me haga su chico…
Apenas he dado dos pasos desde el escritorio cuando se acerca detrás de mí, acompañándome hasta que tengo mis manos apoyadas en el alféizar de la ventana que da al patio lateral. Mi trasero encaja perfectamente en su regazo, ambos respiramos con dificultad y la parte inferior de mis bragas se humedece.
"Hola papi."
Su gruñido hace que se me ponga la piel de gallina en las extremidades, y sus dos manos se deslizan por mi cuerpo para apretar mis pesones.
“Estos volvieron a endurecer mi polla. Estos pezones nunca son blandos, ¿verdad? Siempre estan duros. Siempre burlándose de mí”.
Un cálido escalofrío me recorre. "Lo lamento. No lo digo en serio”.
Sus palmas moldean mis pesones, su aliento caliente en mi cuello. "No te burlas de mí a propósito porque te gusta la forma en que te froto bien..." Su mano derecha recorre mi vientre, comenzando un masaje lento y firme de mi pene. "¿Aquí?"
Gimo, moviendo mi trasero contra su rígida erección.
"Estoy listo para más", digo en voz baja, entrecortada, mientras mi aliento empaña la ventana. Su mano se detiene.
"No podemos".
Mi entrada late ante esas dos palabras. "¿Por favor? Solo un poco." Nuestras miradas se fijan en el cristal. "No se lo diré a nadie".
La parte inferior de mis bragas está bajada hasta mis tobillos. "Oh, chico malo". Mi trasero recibe una fuerte bofetada. "El pequeño mocoso de papá, ¿no?"
"Sí." Un momento después, Bible, lenta y cuidadosamente, presiona solo la punta dentro de mi entrada, empujándola hacia adentro y hacia afuera, solo la cabeza suave, hasta que estoy gimiendo, atrapado en una niebla de lujuria, con las uñas arañando el alféizar de la ventana. "Más. Por favor."
"Mierda. No puedo evitarlo”, gime, empujando profundo y fuerte, poniéndome de puntillas y provocando un grito en mi garganta. Ambos permanecemos así durante largos momentos, regocijándonos de estar completamente unidos, nuestro juego en pausa mientras Bible besa mi hombro, mi cuello. "¿Sabes lo feliz que me haces, Build?"
Mi risa es sin aliento. "Me estás dando una pista bastante importante".
Su risa profunda se une a la mía, pero siento que se pone serio. “Cada día me enamoro más de mi esposo. Es una obsesión. Es necesidad. Todo el tiempo, ángel”. Se desliza fuera de mí y empuja con fuerza hacia arriba, levantando la mano para agarrar mi cabello y tirando ligeramente. "Cada día. Cada hora. Cada minuto."
"Es lo mismo para mí", jadeo, mi clímax comienza a construirse. "Te amo."
"Eres mi corazón." Empuja, mordiendo mi cuello. "Mi alma. Mi eternidad. Te amo."
Y con nuestras declaraciones flotando en el aire, hacemos el amor como si el mundo se estuviera acabando, aunque sabemos que llegará el mañana, y sera un día mejor que el anterior.
FIN
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Ahora si esta historia llega a su final, gracias por leer, por los mensajes y por sus estrllitas. Lo aprecio mucho.
* Y recuerden esto es pura ficcion con el unico afan de entretener y distraerse un rato, no hago esto con segundas intenciones.
Bye ❤❤❤❤❤
