Después de un rato quedándonos en la misma posición, nos separamos, yo no dejaba de mirar al suelo y en eso el hablo.

-te sientes mejor- dijo con una gran sonrisa que me reconforto.

-si- dije con la mirada baja

-si quieres puedes contarme lo que te sucede, yo te prometo escucharte hasta el final-.

Lo voltee a ver rápidamente, y me tope con su rostro, con una expresión que no lo caracterizaba, era como si se sientiera mal por mi.

E-esta bien creo- dije muy poco convencida por lo que estaba a punto de hacer.

-lo que pasa es... Que mi mamá me abandono cuando acababa de nacer y nunca ni una maldita vez pregunto por mi era como si no existiera para ella Y ahora vienen y me dicen que ella se encuentra en coma y quieren que valla a verla, por qué tengo que preocuparme por ella cuando fue ella la que no me quiso, no sabe lo tanto que e sufrido por no tener una mamá- dije comenzando a llorar pero por alguna razón el seguía escuchando.

-y que es lo que quieres hacer?-Dijo directamente a mi.

Lo quedé viendo sin saber que decir o hacer.

-no crees que ella tuvo sus razones para hacer eso- dijo seriamente.

-que estás diciendo ella me abandono y jamás trato de aclarar nada- dije comenzando a molestarme.

-eso no lo sabrás nunca si no lo escuchas de ella misma lo que sucedió ,pero si le pasará algo antes de que la vieras por última vez jamás lo sabrás y podrías quedar con un gran arrepentimiento- lo último se sintió como si lo estuviera diciendo por experiencia propia.

-n-no lo se es difícil para mi- dije poco convencida.
-piensa un poco más, yo se lo que te digo, si yo tuviera la oportunidad que tú tienes ahora haría lo que fuera por, siquiera aclarar las cosas-

-pero al final es tu decisión- Quedé un poco pensante ante lo que decía el chico.

-por sierto, no me presenté, mi nombre es Zack, bueno el nombre por el que me gusta que me digan-

-que, tienes otro nombre?-

-es una larga historia, solo dime Zack-

-tu.. como me conoces?-

-a supuse que lo preguntarias, te e estado observando hace tiempo, no soy un secuestrador ni nada por el estilo, solo de repente tome un poco de interés por ti, te veías tan reservada que me dió curiosidad- el decía todo esto con una pequeña risa entre palabras.

-no te preocupes solo quiero que seamos amigos *sonriendo*-

-la verdad te agradezco lo que acabas de hacer y de abrirme un poco los ojos pero no creo que debamos ser amigos, lo siento, tengo mis motivos-

casi saliendo por aquella puerta que daba a las escaleras el me gritó.

-no te preocupes seguiré intentando solo espera- al gritarlo sentí algo extraño en mi ser y mi corazón latío con más fuerza de lo usual.

Al salir de aquellas escaleras y dirigirme de nuevo al salón, volví a pensar en lo que me dijo Zack, tal vez sería bueno tener una explicación, sobre lo que hizo mi madre.

Me dirigí hacia el escritorio de la maestra y le pedi una disculpa por lo de hace un rato, el resto de las clases pasaron como normalmente, a la salida puede ver al chico de la azotea recargado en la puerta de la salida de la escuela, yo solo lo ignore y pase de largo, pero el se apresuró y se coloco a mi costado.

Empezando a caminar a mi par, sus pasos se veian tan lentos a comparación de los míos, el solo me seguia en silencio y entonces me pare en seco.

-por que estas siguiendome- cuestione al chico que también paro.

-no estoy siguiéndote solo te acompaño, sorprendentemente vives para el mismo rumbo que yo- solo podía ver la sonrisa en su rostro que me llegaba a molestar.

-no necesito que nadie me acompañe- dije para comenzar a caminar más rápido, pero era inútil, con solo unos 3 paso el podia alcanzarme .

-vamos no seas tan dura, aparte, te digo que vivimos para el mismo lugar, no miento- resignada solo segui caminando.

Nueva primavera Donde viven las historias. Descúbrelo ahora