𝗼𝗻𝗲. 13 reasons

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━━ ♯ 13 razones﹙written by -antihqros﹚

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﹙written by -antihqros﹚


CELESTE HENNOX TENÍA SOLO UNA MISIÓN. Una misión simple, fácil, y era ocultarle la verdad a Elowyn Van Hall sobre su verdadera especie.

Elowyn creció en el campamento mestizo, veía pasar a varios campistas que se iban a sus casas durante las vacaciones y luego volvían, o simplemente morían, depende si los atrapaba un mounstro. Pero ella siempre se quedaba ahí, no salía, ni por ninguna misión que Celeste o Quirón la embarcarán. Por lo tanto, ya tomaba al campamento mestizo como su hogar, más que nada a la cabaña 11, la de Hermes, dónde llegaban nuevos mestizos cada día y luego los reclamaban como hijos de otros dioses o del mismo de la cabaña, pero a Elowyn ningún Dios o Diosa la había reclamado en sus 12 años que llevaba en ese campamento.

La mestiza se levantaba cada día pensando en nuevas intenciones y acciones buenas para que un Dios o Diosa la reclame de una vez por todas, pero nunca pasaba, aunque Elowyn nunca perdía la esperanza. Se desvelaba pensando porque no lo hacían. ¿Era tan mala y débil? Sentía una manada de celos y dolor en su pecho cada vez que veía que un campista más había sido proclamado. Solo quería tener una familia.

Termino de acomodar sus trenzas y se paró de su cama de un brinco, tomo su mochila y fue hacia la oficina de Diosino, dónde sabía que allí estaría Grover Underwood por su misión de ir en busca del humano Percy Jackson así lo ayudaba a descubrir que era un semidios. Ella quería ayudar. No sabía el porque ni como lo haría, pero sentía la desesperación de querer ir y salir al mundo.

Los campistas seguían con sus actividades mientras los sátiros los ayudaban y las ninfas paseaban por alli, con sus lindos cantos y bailes. Elowyn siempre había amado a las ninfas, las sentía como su escape de los comentarios sobre su rareza que le hacían los campistas y chicas de las que siempre podría confiar.

Clarisse, una de las hijas del Dios de la guerra Ares, y sus demás hermanos pasaron al lado de Elowyn, casi empujándola y riéndose sobre ella y sus orejas. Oh, casi lo olvido, Elowyn Van Hall tenía las orejas puntiagudas y una piel un toque más verdosa que los demás. Nadie sabía por qué o nadie quería contárselo realmente.

Elowyn se sacó unos mechones de su cabello rubio entrelazado y se los puso frente las orejas para disimular un poco. Disimuló su enojo con una risa, como siempre lo hacía, aunque ya estaba harta. Intento no parecer molesta en el momento de llegar a la oficina de Diosino aunque si la conocían bien a detalle sabían que estaba hirviendo de enojo en su cerebro. Al entrar al cuarto vio a Quirón, Diosino y Celeste, la "madre" de las Ninfas, la mayor de todas ellas.

La rubia se escondió detrás de la puerta, así en el momento que Grover terminase de hablar, ella podría entrar y compartir sus opiniones.

Pero alguien la notó.

— ¿Que haces aquí, Elowyn? — pregunto Celeste, una de las Ninfas que sería como la madre de todas, quien se encontraba al lado de Quirón y Diosino.

𝗧𝗛𝗘 𝗣𝗥𝗢𝗣𝗛𝗘𝗖𝗬 ★ percy jacksonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora