𝐍𝐢ñ𝐨 𝐜𝐚𝐩𝐫𝐢𝐜𝐡𝐨𝐬𝐨

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Jimin sonreía tiernamente mientras secaba el cabello del canino. El perrito movía su colita feliz.

Después de estaré seco completamente el rubio empezó a cepillar el pelo del can y también recortó un poco al cabello soltando un gritillo de frustración cuando vio como corto mal el pelo.

— Dios, perdón. Se ve mal esto — se quejo

Luego de terminar, cargo al pequeño perrito entre sus brazos y fue acostarse en la grande y cómoda cama.

— Espera aquí, deja me cambio — dejo un pequeño beso en la cabeza del can

Una vez ya cambiado, se acostó en la cama y se cobijo junto al perrito.

— ¿Jungkookie se enojara? — se cuestionó mientras tapaba al perrito con la colcha. Eran días muy fríos, el tenía mucho frío y eso que estaba con su pijama calientita. No se imagina el frío que tendría el perrito

Después de casi dos horas, escucho la puerta ser abierta, indicando que su novio había llegado. Se tapó con la cobija al igual que el can y solo dejo su cabeza afuera.

— Jiminie. Compré tus dulces favoritos, ven.

— ¡No puedo, estoy acostado! — grito

— Niño caprichoso, ya voy para allá — hablo

JungKook vio el pequeño bulto en su cama y sonrió tiernamente.

— Mi bebé hermoso tiene frío — comento mientras intentaba quitar la cobija — ¿Tienes mucho frío?

— Uhg... No te enojes, por favor — pidió — Estaba solito en la calle

JungKook quito con brusquedad la cobija dejando ver cómo Jimin abrazaba a un perro.

— ¿De dónde sacaste esa cosa? No Jimin, no quiero animales aquí — Dijo

— Gureum, no tiene a dónde ir. Por favor cuídalo, mi mamá no me deja tener mascotas — acarició el pelaje mal cortado del can

— Yo menos. Los perros son un fastidio. Además, ¿Gureum? ¿Esa cosa ya tiene nombre?

— Kookie, por favor. Lo bañé y corte el pelo para que se viera bonito, ¿No? Parece una nube

— El perro es feo, no quiero animales.

— Por favor, yo lo voy a cuidar. Mira le corté el pelo — empezó a sollozar — No tiene un lugar donde ir, hace mucho frío y de seguro no tiene nada que comer en la calle.

JungKook se sintió un poco mal al ver como Jimin empezaba a llorar mientras abrazaba al pequeño perrito.

— Bien, se quedará aquí pero lo tenemos que llevar a una veterinaria. No sabemos si tiene pulgas u otras cosas, aparte le cortaste mal el pelo — señaló al perro — Ya no llores, niño caprichoso.

— No soy caprichoso — limpio sus lágrimas e hizo un puchero

— Ajá, sí. A ver el perro

— Se llama Gureum porque es una linda nube .

⟬❤️‍🩹⟭

— Mira que lindo, estás muy bonito. ¡Mira, cariño! Gureum ya tiene su pelo parejo — alzó al pequeño cachorro

— Y no lo querías... — Murmuró el rubio

— La ropa que le compramos le va a quedar muy linda

— ¿También compraste mis chocolates? — cuestionó

— Claro, pollito. Están aquí en esta bolsa — le dió una bolsa con varios chocolates.

¿𝚃𝚒𝚎𝚗𝚎𝚜 𝚄𝚗 𝚂𝚞𝚐𝚊𝚛 𝙳𝚊𝚍𝚍𝚢? 𝙺𝚘𝚘𝚔𝚖𝚒𝚗 ᴬᵈᵃᵖᵗᵃᶜⁱᵒⁿDonde viven las historias. Descúbrelo ahora