9.

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Dios, no comprendo cómo es que WonWoo anda con MinGyu. Estoy segura que pronto lo botara, pobre. MinGyu no es una buena persona.

WonWoo no comprendía como la gente podía decir tales cosas. Se estaba mordiendo el labio inferior para no explotar y gritarle a su compañera.

Escuche que se tiró a una del otro salón.

¿En serio? Dios, WonWoo tendría que alejarse de una buena vez de MinGyu.

Si...

¿Viste como golpeó a los de tercero? Es una bestia.

Apretó con rabia sus puños. Sabía de que hablaban, hace unos días fue a sorprender a su novio en su aula, aunque éste no estaba. En esos minutos que estuvo, alguien lo estampó contra la pared con intención de intimidarlo, diciéndole que era un estúpido por andar con MinGyu, y que seguramente el pelinegro le botaría. Realmente le dolió escuchar eso, hasta que entró su novio por la puerta y lo defendió, diciendo que nunca haría tal cosa, aunque el otro chico comenzó a empujar al mayor y éste reaccionó golpeándole. MinGyu sólo le defendió... y todos ahora pensaban que el mayor había golpeado a sus compañeros porque si.

No aguantó más, tomó sus cosas, se colgó la mochila y salió del aula.

Si tan sólo la gente se tomará el tiempo de conocer a MinGyunnie, notaría que todo lo que dicen es mentira. MinGyu era como un niño en el cuerpo de un hombre, le gustaba comer dulces junto a WonWoo, acurrucarse a su lado en busca de mimos, despertarle todas las mañanas con suaves besos, abrazarle por la espalda cada vez que tenía la oportunidad, reírse hasta de los chistes más tontos que contaba el menor. Bajo todas esas pintas de chico malo, lleno de perforaciones y tatuajes, se encontraba el verdadero Kim MinGyu, un chico normal que amaba la música y los perritos. Su MinGyu.

¡𝗚𝘆𝘂𝗻𝗻𝗶𝗲!  ୨୧  𝖬𝖾𝖺𝗇𝗂𝖾Donde viven las historias. Descúbrelo ahora