(TOM)
Me encontraba en el aeropuerto, hecho un manojo de nervios, era el día de la verdad, Larisa llegaría de un momento a otro y yo tenía un ataque de pánico, no podía ni siquiera bajarme de la camioneta, nada tenía que ver con las ocasiones en las que había fantaseado con el momento, en llevarle flores y esperarla como un caballero de brillante armadura.
Paul carraspeo, aclarandose la garganta, me había sentido incapaz de ir solo al aeropuerto a recogerla y opte por qué Paul condujera mientras yo me mordía las uñas en la parte trasera de la Escalade que usábamos cuando teníamos algún evento o cuando necesitamos pasar de incógnito en lugar de conducir nuestros vehículos particulares.
-yo puedo ir a recibir a la señorita-ofrecio nuestro guardaespaldas y hombre de confianza.
Lo miré, agradecido por su iniciativa.
-por favor Paul-le pedí- lleva una hoja o algo con su nombre, yo le aviso.
Paul bajó del vehículo y lo observé como se alejaba hacia el interior del aeropuerto... Mierda, mierda.
Tomé mi teléfono celular de mi bolsillo y le escribí un mensaje de texto, explicándole que Paul la recibiría en la sala de llegadas. Me respondió 30 segundos después, diciendo que estaba bien.
Comencé a jugar con el cinturón de seguridad de manera ociosa, mientras miraba de manera nerviosa por la ventanilla del auto, recordando fragmentos de mis sesiones de terapia... "Deja que ella de siempre el primer paso, respeta siempre su espacio y sus límites" (1) Mis ojos se toparon finalmente con Paul caminando y cargando maletas, seguido de cerca por Larisa, quien parecía cansada. Una sonrisa estúpida se me dibujo en los labios al verla, era real, ella estaba ahí.
Ambos se detuvieron a un lado de la camioneta, Paul abrió la puerta trasera derecha y mi mirada se topó con la de Larisa, finalmente.
-hola- la saludé, sin poder dejar de sonreír.
Larisa trepó a mi lado y me miró unos instantes, sonriendo también.
-hola-respondio.
Un instante después la tenía colgada de mi cuello, abrazándome con fuerza. Correspondí el gesto de manera inmediata, sintiendo como me corría la electricidad por la piel, como mi corazón quería salir volando desde el interior de mi pecho y perderse en el de ella. Escuche como Paul cerraba la puerta para darnos privacidad.
-te extrañe tanto-murmure contra su cabello, aspire el suave olor que emanaba de ella, a naranja y caramelo-tanto tanto.
Ni siquiera recordaba la fecha de la última vez que la había podido sostener así, entre mis brazos, pero habían sido años.
-yo también-susurro contra mi cuello, con la voz rota- te amo Tom.
Nos separamos para mirarnos los rostros, Larisa lloraba y sonreia a la misma vez. Limpie sus mejillas con mi mano, acune su rostro con mi mano y le besé las mejillas, la nariz, sin prisas, una risita emergió de su interior.
-yo también te amo Lari-respondi, con un nudo de emoción en la garganta- no llores.
Larisa entreabrio los labios y yo se los miré, tenía hambre de ella, de esa boca que siempre había sido una fruta prohibida para mí.
Paul carraspeo y le preste mi atención, encontrándome con su mirada en el espejo retrovisor central.
- ¿Nos vamos ?-cuestiono nuestro guardaespaldas.
Asentí con la cabeza y miré de regreso a Larisa, estudie con detenimiento su rostro, era tan bella que me dolía. Sus enormes ojos grises parecían escanear cada milímetro cuadrado de mi rostro.
-esa barba te da un aire de señor maduro-mencionó ella y yo me reí.
-Cheryl opina que parezco vagabundo- respondí, ahogando una carcajada.
Larisa me acarició la mejilla de manera suave y yo la acerque a mi costado, sintiendo una dicha inmensa al darme cuenta de que su cuerpo encajaba con el mío
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(1) no tengo calidad profesional para hablar acerca de la terapia psicológica, hablo desde el contexto imaginado de la historia, siempre es importante acudir a un profesional para recibir terapia.
Gracias bell@s
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Redención (Tentación#2)
RandomHan pasado tres difíciles años y ahora Tom Kaulitz se enfrenta a grandes acontecimientos que pondrán su vida de cabeza, entre el ascenso de su carrera profesional, la llegada de su amada Larisa desde Francia y su duda sobre la paternidad de Patrick...