Law and Love | Wandanat

4: First sight.

Wanda salió de su casa apurada, tenía que llevar a Yazmine al colegio y luego debía ir a su entrevista de trabajo. Tenía que causar una buena impresión, no podía llegar tarde a su entrevista.

Wanda se enteró de que en un despacho de abogados estaban buscando a una penalista, y ella vió su oportunidad para comenzar de nuevo.

A todo esto, había pasado una semana desde los sucesos del bar y Wanda estuvo limpia de alcohol durante ese tiempo. Todo sea por conseguir el empleo.

– Mamá conduce rápido, vamos a llegar tarde – Le decía Yazmine mientras Wanda conducía.

– No, hija, llegaremos bien, tranquila.

– ¿Estás nerviosa por tu entrevista? – Preguntó Yazmine.

– Demasiado.

– Igual yo – Yazmine miró hacia la ventanilla.

– ¿Tú por qué? – Su hija sólo la miró sin decir nada – Oh por Dios... Mierda, lo olvidé, hoy tienes tu cosa de baile.

– No le digas cosa, es una competencia – Se cruzó de brazos.

– Está bien, competencia... – Se golpeó la frente frustrada – Hija, voy a tratar de llegar. En cuanto termine la entrevista iré rápido – Quitó la vista del camino para ver a Yaz.

– Ni te molestes. Nunca vas a nada del colegio, una cosa más no va a cambiar nada – Le dijo molesta.

– Yaz, pero yo quiero ir, se que es importante para tí.

– Pero no parece que quieras ir. Como siempre te olvidas de mí.

– Yo no me olvido de tí. Por algo voy a hacer esto de la entrevista, para conseguir un trabajo que me ayude a enderezarme y que ambas podamos estar bien – Wanda empezó a estacionarse en cuanto llegaron al colegio – Si consigo este trabajo, podré estar mejor y pasaremos más tiempo juntas – Frenó el auto y se volteó a ella para hablar mejor.

– No lo haremos, no cambiará nada – La miró aún molesta.

– ¿Por qué dices eso?..

– Porque aunque dejes tus vicios, te la pasarás trabajando y yo me quedaré sola como siempre – Dijo triste.

– Yaz no... Eso no pasará, yo ya no quiero dejarte sola.

– Aunque no quieras, pasará. Yo te conozco y te volverás una adicta al trabajo... – Yazmine abrió la puerta del auto – Siempre tienes que ser una adicta a algo – Salió del auto sin decir más nada.

– Yaz... – Le cerró la puerta del auto y Wanda la observó triste mientras entraba al colegio – Lo siento.

————

Natasha se encontraba en su oficina, sentada en su escritorio. Estaba bastante distraída, tenía la cabeza en las nubes por alguna razón extraña, además estaba bastante estresada con el trabajo.

Una voz la sacó de sus pensamientos y al ver hacia la puerta, vió a su asistente que entraba a toda prisa.

– Natasha, ¿las entrevistas las quieres aquí en tu oficina o en la sala de reuniones?

– Disculpa, ¿que entrevistas? – Preguntó confundida.

– ¿Recuerdas que tienes un nuevo caso y te hace falta otro abogado penalista? Tú eres la única y no puedes con todo.