Ojos color Cielo

mal comienzo

Enid

Desperté por unos fuertes ruidos abajo, salí de mi capullo con olor a café y pino asomando mi cabeza por el cuello del suéter, unos pasos apresurados subiendo las escaleras me alertaron, me quite el suéter y lo puse debajo de mi almohada, tocaron la puerta muy insistentemente hasta que escuché del otro lado hablar a uno de mis hermanos
-hey cachorra, alfa dice que bajes a desayunar que tiene algo importante que decirle a la familia - ví como los pies de mi hermano desaparecieron de la puerta y me levanté, entré al baño de mi habitación, lave mi cara y dientes volví a observar la cicatriz en mi rostro y un suspiro salió de mi boca; tomé la crema para cicatrices que mamá me había dado y la unté en esta, cambie mi pijama por unos pantalones jeans un poco sueltos una blusa blanca que me llegaba al ombligo y encima una chaqueta color morada algo sencillo, peine mi cabello y puse un poco de bálsamo estaba un poco frío afuera, salí y estando en la sala ví que todo estaba preparado así que me senté frente a papá y mamá aun lado de el, teniendo a ambos lados a mis hermanos-buen día- dije

-enid hoy para la cena vendrá un socio de mi empresa y traerá a su hijo menor, es alfa y tiene 17 años por favor tratalo bien y se educada- dijo mi madre, casi escupo el jugo de naranja por tales palabras

- disculpa alfa, está ofreciendome que haga algo con ese alfa que vendrá a casa?- dije viendo a mi madre con miedo por qué dentro de mi se la respuesta pero no quiero escucharla afirmar lo que pienso

-si, necesitamos una pequeña alianza con esta empresa y sería una excelente oportunidad para que salgas con ese muchacho y la alianza se haga más rápido - mi más grande temor se hizo realidad, ahora mi madre me está vendiendo al mejor postor como si fuera un postre deseado -no haré algo así alfa aunque sea una Omega sigo siendo un ser vivo no un objeto que puedas intercambiar - un fuerte golpe sonó en la mesa y ví como mi madre se levantó de su silla su olor era muy fuerte y tenía odio impregnado en el -no me vuelvas a hablar así entendido? Soy tu alfa y vas a hacer lo que yo te diga y tú obedeces- asentí asustada volvió a sentarse en su silla y ví como mi padre tenía su cabeza agachada un ardor en mi estómago senti recorrer hasta mi garganta, salí de mi burbuja de coraje por la nariz de mi hermano olizquear en mi cuello como buscando algo -¿Que rayos haces? - lo alejé de mi, me incomodaba tenerlo tan cerca

-hueles a un alfa desconocido - todos volvieron su vista hacia mí con duda -¿A qué te refieres con eso? - dije dudosa y un poco nerviosa por eso

-si, hueles diferente y se que no es tuyo, me recuerda a un olor en particular - volvió a olerme y está vez mi otro hermano me olió -es verdad hueles como a - ambos se voltearon a ver en un instante y al mismo tiempo dijeron - Addams - abrí los ojos en sorpresa.

-no sean tontos ella vive del otro lado del país y hace 2 días que no la veo - mi mamá se me quedó viendo analizando mis palabras y yo reí nerviosa

-esa Addams no es la hija de Homero Addams el dueño de la empresa de armamentos y seguridad privada más grande del país - asentí con preocupación en mi rostro -¿y es tu amiga? ¿Y es alfa?- yo solo asentí y ví a mi mamá

-ella es la alfa que conté en la cena - su rostro volvió a transformarse ahora con una mueca de asco -bueno es mi mejor amiga de hecho - hubo un silencio en la sala y solo volvieron a sus alimentos, yo sentí un alivio y volví a mi comida; hoy no tenía muchas ganas pero tenía que comer.

El jardín de mi casa da directamente al bosque de un parque así que después del desayuno decidí dar una vuelta por el lugar, el bosque es bastante tranquilo y su olor me recordó a ella, caminé por todo el sendero hasta llegar casi a la playa, me senté en un tronco viendo al mar, no se cuánto caminé ni cuando estuve ahí, regresé a la realidad cuando mi teléfono sonó, ví la pantalla y era mi mamá llamando, conteste.