- Hey Tom.
- ¿Si?
- ¿Puedo acompañarte hasta la salida?
- Sí puedes.
- ¡Yay! - pone una sonrisa en su carita pequeña.
- Vamos - le agarra la mano y lo lleva con él.
Algunos padres decían que podrían ser hermanos y otros que son amigos, era algo que no sabían cómo describirlo, no pensaban que estos se querían claramente de una manera linda y sin maldad. No culpes la inocencia de un niño, ellos desconocen como es el mundo que lo único que les interesa es el famoso YO.
- Tom.
- ¿Pasa algo? - recibe un abrazo de este, se sonrojo un poco, no entendía por que luego se puso como un pequeño tomatito, pero se sentía bien.
- Te quiero - decía con dulzura a su acompañante.
Algunas personas que estaban cerca se les hiso eso muy tierna la amistad.
- También te quiero Tord - le da un pequeño abrazo y se van los dos niños a la salida. Que lindos los niños.