El Usuario de Espíritus conoce a las enviadas de la Iglesia

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◇Pov Kyoko◇

Al abrir los ojos pude observar un lugar desconocido para mí.

En este lugar parecía como si se estuviera celebrando una boda.

Me puse increíblemente nerviosa ya que, si estuviera en una boda, eso significa que estoy dentro de una iglesia.

Me preparé para cuando sintiera dolor y... luego me di cuenta que desde un inicio no sentía dolor.

No entendía el porqué de esto, por lo que en medio de mi confusión me puse a inspeccionar con la mirada este sitio.

Tal y como había imaginado, esta era una iglesia.

Al voltear atrás mío, pude observar que la iglesia estaba llena, incluso parece que hay personas afuera de la iglesia.

Es una cantidad realmente grande de invitados, pero, ¿quién se va a casar? O más bien, ¿en qué momento llegué aquí?

La voz de dos personas que me resultaron conocidas hizo que recobrara la consciencia.

Al voltear en aquella dirección pude observar a mis padres, los cuales estaban bien vestidos.

-¿Qué es lo que está pasando? (Kyoko)

Pregunté bastante confundida del por qué estamos aquí.

-¿De qué estás hablando? Esta es tu boda. (Gorou)

-¿Eh...? ¿¡EEEEHHH!? (Kyoko)

¿Qué? ¿Cuándo? ¿Cómo? ¿Dónde?

-¿D-

Quise preguntar algo, pero fui interrumpida.

-Todas las demás ya están en el altar, solo faltas tú. (Miki)

¿Todas las demás? ¿A qué se refiere con eso?

No, espera, ¿no se suponía que el altar estaba frente a mí?

◇◇◇◇

Luego de caminar un poco salimos al patio trasero de la iglesia.

Espera, ¿las iglesias tienen patios?

Bueno, eso no importa, tengo mucha curiosidad sobre esto, pero eso no es lo más importante del asunto.

¿¡Cómo es eso de que me voy a casar!?

Estaba sumamente perdida en mis pensamientos, pero ese pensamiento resonaba fuertemente en mi mente.

-Ya llegamos, ahora sube. (Miki)

Me empujaron para que subiera al altar.

Al darme cuenta de mi entorno me sentí confundida y a la vez increíblemente sorprendida.

Eramos muchas mujeres con el mismo traje de novia.

Contándome a mí quizás seamos alrededor de 27.

¡Es una cantidad completamente exagerada!

Luego me di cuenta de algo.

¡No puedo ver sus rostros!

De hecho, tampoco puedo identificar el color de cabello.

Mientras trataba de adivinar quienes eran, pude apreciar que si podía reconocer a alguien.

Era mi hermano. No, era Issei.

De repente se me acercó, se notaba la preocupación en su rostro.

-¿Estás bien? Estábamos preocupados porque no llegabas.

-Ver-

De repente todo a mi alrededor se empezó a deformar y una cantidad abrumadora de llamas apareció por todos lados.

Conquistando un mundo sobrenatural con la diosa de cero creyentes.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora