Consecuencias

1.7K 311 20
                                    

Nada más volver a girar por la esquina encontré a mi padre de frente esquivando por poco el golpe con su bastón.

Casi me deja otra cicatriz en la cara pensé mientras lo miraba sentado en el suelo

-Te atrapé- dijo con una sonrisa arrogante

-¿Estás seguro?- respondí mientras me movía para echar a correr por el pasillo rumbo a las escaleras que subían al desván intentando a toda costa no recibir los hechizos más dolorosos o que me pudieran matar en el momento ya que por extraño que parezca no me apetecia morir a manos de mi padre

-¿Donde está la valentia que estabas mostrando hace un momento?- grito mi padre antes de lanzar un hechizo cortante que impacto por mi lado derecho

No ves que se quedó a bajo, imbécil pensé mientras veía mi brazo derecho empezar a salir sangre Mierda aceleré el paso para poder llegar sin más heridas que pudieran delatar mi ubicación una vez dentro.

Abrí la puerta mientras me agachaba evitando que me diera uno de ellos pero no pude esquivar la puerta del armario donde había caído el hechizo haciendo que cayera de bruces contra el suelo

Mierda pensé mientras veía como la puerta tenía atrapada mi pierna derecha Destino quieres matarme otra vez grité en mis pensamientos frustrado sacando mi pie como podía

-Mas rápido, más rápido- dije mientras movía como podía la puerta -Que mal momento para dejar mi varita atras- murmuré consiguiendo sacar mi pie de debajo de la puerta

-Es inútil esconderse mocoso ingrato- oí desde las escaleras mientras yo solo me arrastraba por el suelo mientras entraba en el modo de supervivencia que había adquirido después que pase todo ese tiempo en manos de la Tía Bella y Greyback.

Las heridas hechas por los hechizos ya no dolían, era como estar anestesiado por ahora. Sabía que el dolor volvería con mayor intensidad una vez que la sensación desapareciera de mi cuerpo, con lo que no contaba era con el golpe metálico que recibí en el costado.

El aire de mis pulmones desapareció, mi visión se volvió borrosa y mis piernas cedieron ante mi peso

-Te encontré

Fue lo último que oí antes de recibir otro golpe contra mi costado.

🌘🌔🌕🌖🌒

-Es por tu bien, Draco- dijo Lucios sin dejar de golpearme con su bastón

-Nunca has hecho algo por mi bien...- dije entrecortado -...solo por el tuyo- sonreí, dejando a la vista mis dientes manchados de rojo -Eres patético- dije con desprecio antes de manchar sus zapatos con mi saliva

-Tu eres igual que yo pequeña escoria- gruño antes de volver a patearme con fuerza

-Yo nunca seré como tú...- dije mientras sentía como mi cabeza era separada del suelo al ser agarrado con fuerza de mi cabello

-Eso ya lo veremos- dijo con una sonrisa arrogante -He ido por las buenas- soltó mi pelo y mi cabeza fue directamente recibida por el suelo -Y no has aprendido nada

Esto es ir por las buenas pensé mientras lo veía alejarse poco a poco de mi

-Asi que iremos por las malas- sonrió mientras sacaba su varita del bastón -Esperemos que aprendas de este método

Nadie te prepara nunca para recibir una maldición imperdonable, te preparan para el dolor de recibir un hechizo, también para la traición de que alguien que conozcas te haga daño y más cosas...
Pero nunca para una maldición imperdonable, nunca para eso.

Draco Malfoy y un traidor sueltoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora