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??? - Maestro Bell, ya estoy cansada - dice una chica.
Bell - Si quieres poder debes asegurarte de poder controlarlo -
??? - Lo se, pero si tengo este poder de que me sirve entrenar cuando ya tengo algo con lo que luchar -
Bell - ¿Pero si pierdes el control y destruyes o matas a alguien que quieres, qué es lo que harás al respecto? -
??? - Lo se pero... -
Bell - Sabes, si hubiera querido te hubiera dejado en esos callejones de esa ciudad de bandidos, pero te elegí a ti por qué se que harás algo muy importante que revolucionara este mundo marchito -
??? - ¿En serio soy tan importante? - dudando de las palabras de su maestro.
Bell - Si, aunque tú poder sea corrupto podrá ser usado por el bien, confía en este viejo -
??? - ¿Un viejo?, pero si pareces un adolescente demasiado descuidado maestro -
Bell - No te burles de mi Nataly -
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Bell estaba despertando en su habitación, después de un largo día por fin pudo descansar y despertar al día siguiente con las energías renovadas.
Bell - Muy bien, primero que nada iré por algo de comer -
Aunque al ver por la ventana rápidamente se dió cuenta de que el sol todavía no había salido.
Bell - Parece que tendré que cocinar me algo - lamentándose de despertar muy temprano.
Después de darse un ligero baño y ponerse algo cómodo fue hacia la cocina y al ver que no había nadie tomo con confianza las cosas para cocinar.
Mientras estaba en el proceso el olor de la comida estaba empezando a flotar en el aire aunque casi no había nadie todavía, excepto una peli dorada que se había levantado temprano para entrenar.
Cuando sintió el olor se le vino a la memoria lo que cocinaba su madre así que se acerco y al entrar vio a alguien sentado comiendo lo que parecía alguna especie de sopa.
Aunque pudo ver qué la persona que estaba comiendo no era alguien de la familia o alguno de los cocineros o alguien familiar.
Bell - Hola jovencita, ¿también buscas algo de comer a estas horas o no puedes dormir? -
Aiz - Solo salía a entrenar pero sentí el olor de la comida desde los pasillos y me dió curiosidad -
Bell - Huele muy bien verdad, está receta te hace recordar buenos tiempos, la aprendí con una vieja amiga -
Aiz - ¿Vieja amiga? -
Bell - Si, su nombre era Aria, una mujer bondadosa pero muy agresiva si se le provoca, lo aprendí por las malas -
Aiz - ¿Conociste a mi madre? - sorprendida ya que está atrapada en el dragón negro desde hace mil años.
Bell - ¿Madre?, pero si ella fue atrapada hace mil años y nunca supe que tuviera una hija o más bien sería imposible -
Aiz - ¿Por qué es imposible? -
Bell - Ella era un espíritu, su cuerpo no podía crear vida ni aunque lo intentará, a menos que.... - pensando algo que le dijo a Aria - no creo que lo haya hecho -
Aiz - ¿A que se refiere? -
Bell - Nada importante - pensándolo - ¿en serio eres hija de Aria? -
Aiz - Si, y mi padre es Albert Wallenstein -
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Danmachi: Un elfo inmortal.
Fantasía¿Que pasa cuando un elfo sin propósito llega a Orario? (Perdón por la descripción sin sentido).