Brillas (bluey)

"Viejo Lobo"

Rosarito, baja California, México,
8 AM...

Estamos casi al otro lado del mundo. En la tranquila mañana, un can de un peinado y pelaje rubio algo exhuberantes se encontraba al volante de lo que algunos llamarían "troca" o una Ford Lobo 2010 mientras la música llenaba el interior del vehículo.

Después de una jornada larga de trabajo en las plataformas petroleras del golfo de México, éste can emprendió un viaje largo desde Veracruz con destino hacia la frontera de Tijuana con San Diego, USA, para un encuentro especial en los Ángeles. Aunque tuvo una pequeña distracción de paso a otra ciudad...

La luz del sol reflejada en las olas del océano parecían no desvanecerse cuando él en el coche se alejaba lentamente mientras el can conducía por las abiertas carreteras. La brisa que llegaba hasta él desde el océano cercano golpeaba su rostro, lo que le recordaba la libertad que sentía en su niñez. A medida que avanzaba, su mente se llenaba de expectación y intriga involuntaria (aunque suene extraño) del encuentro que le esperaba en la frontera.

De repente, el teléfono suena, lo que ocasiona que el tono de llamada interrumpa la música dentro del coche. Nuestro can se frustra un poco por el repentino cambio y a regañadientes contesta mientras conduce.

???: ¿Hola? Ejem, (quise decir) ¿Pa' qué soy bueno?
-preguntó a la otra línea cambiando a un acento un tanto peculiar al que solía tener en Brisbane

???: (Audio de la camioneta) Compa Radley, nomás le llamo pa' preguntarle; ¿cuánto le falta pa' llegar?
-contestó una voz

Rad: bueno... Ahorita en corto llego, como en que(? Una hora yo creo estoy allá.

???: Órale pues. Y también le quería avisar que hay un tráfico infernal en la frontera, se aventaron un choque bien feo. Ahí está todo el mitote, viejo.

Rad: Que mal... Bueno, voy a intentar no perderme.

???: Arre pues. Suerte.

Rad: nos vemos.

Radley cuelga el teléfono y pisa el acelerador para continuar su camino con más prisa y cuidado en la carretera.

Pasado un tiempo, finalmente el heeler llegó al cruce fronterizo, donde una línea de vehículos esperaba su turno para atravesar la frontera hacia San Diego, mientras que por otro lado, habían vehículos que llegaban del otro lado.

Rad sólo esperaba su turno en la taquilla, observando a otros automóviles y escuchando las voces y risas de los pasajeros.

Una hora después llegó su turno para pasar por taquilla. Aunque estaba un poco nervioso por tener en cuenta a quién volvería a ver en su paso por el cruce después de tanto tiempo.

"Un doble vaso, traigo en mi mano-...🎵"

La taquillera, quien era una can Xoloitzcuintle, sonrió maliciosamente para sí misma, rodó los ojos y dió un suspiro pesado al escuchar la canción del coche que se acercaba a su cabina donde atendería. Supo inmediatamente de quién podría tratarse...

???: Lil' vato... -dijo en un tono meramente engreído y burlón explotando el chicle que estaba masticando- o mejor dicho, "Nerd" Heeler jajaja -añadió en un tono burlón secretamente cariñoso para después darle la cara al conductor del vehículo

Rad: Eiza... -mencionó el heeler regresando la mirada, se quitó la gorra con icono de pastor australiano de su cabeza pero no los lentes de sol. Siempre manteniendo su tono y semblante serenos, sin dejarse intimidar por ella-

Al voltearle a ver, secretamente no pudo mantenerle la mirada a los ojos sin evitar perderse en sus caderas y curvas delatadas por el ajuste que ella le daba a su uniforme probablemente en exclusiva para él. ¿Cómo Radley no podría después de tanto tiempo de no saludarse?