Capítulo 2

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Llegaste y me enseñaste que estar roto no era una debilidad y tener cicatrices no significaba que fuéramos irreparables

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Llegaste y me enseñaste que estar roto no era una debilidad y tener cicatrices no significaba que fuéramos irreparables.
- Ron Israel.

Vuela en lo alto del cielo entre las nubes grises viendo desde ahí como el pálido hechicero se vuelve loco, pues hace seis meses que los persigue sin embargo nunca logra nada, Jungkook se encarga de desviarlo del camino y cuando Min se da cuenta de que sigue un camino equivocado ya es demasiado tarde, es jodidamente divertido ese hechicero.

Él realmente cree que puede vencer a SeokJin, sin embargo Min no tiene ni la más mínima idea del poder que posee, ni Jeon sabe realmente la magnitud pero si esta completamente seguro de que es realmente increíble. El solo hecho de haberlo capturado demuestra cuan poderoso es.

Jungkook no recuerda cuánto tiempo estuvo atrapado está vez, la última vez que estuvo en el mundo aún estaban en guerra y no existían los clanes de magia, solo existía un hombre.
Ese hombre era realmente poderoso, él fue quien lo mato y lo maldijo por haber querido huir y salvar a su familia, pero ese hombre cometió un error y Jungkook se apoderó de gran parte de su poder, lastimosamente fue condenado a ser un sirviente que funciona como arma, fue esclavo de ese tipo y le ordeno matar a su propia familia.

Jungkook no podía desobedecer a ese hombre, era parte de la maldición así que en contra de su voluntad mato a sus pequeños hermanos y a sus padres.
Con el tiempo lograron matar a ese hombre y Jungkook desapareció, porque él solo puede existir para servir así que si nadie hacia el hechizo para invocarlo, él no existía.
Sin embargo con el tiempo Jungkook logro tener más poder que robaba de sus dueños, aquellos que lo usaban para matar y cazar, Jungkook había matado a demasiadas personas y creaturas, él incluso es considerado como un demonio, logro robar mucha energía y ahora ya no serviría a nadie porque ya era demasiado poderoso, su poder logro romper esa maldición; sin embargo él apareció y todo cambio, Kim Seok Jin logro atraparlo de nuevo, Jungkook llevaba más de mil años capturando energía y tenía experiencia sin embargo ese chico logro sobrepasar su poder.

Kim SeokJin es realmente poderoso, el más poderoso que ha visto.

¿La razón?

No se sabe es desconocido, pero él es diferente.

Jin nunca le ordeno matar a nadie, nunca lo uso para hacer hechicería maldita o hacer rituales con su cuerpo. El hechicero bonito aunque es frío la mayoría del tiempo, también se preocupa por él y siempre sale con esa locura de que si llega a morir, use su cuerpo para ser libre. Jungkook jamás conoció a una persona tan tonta como Jin, sin embargo también es la primera vez que quiere servir a alguien por voluntad propia así que si mataba a alguien era porque quería, no por órdenes de Jin y eso lo hace con mucho placer.

Jungkook protegerá a SeokJin con su vida y tal vez y solo tal vez, esta vez sea libre para jamás volver a existir.

Sin embargo ese pensamiento le oprime el pecho y siente como la energía en su cuerpo se desequilibra, algo realmente raro ya que no sabe a qué se debe y nunca antes experimento tal sensación, porque también siente cosquillas cuando ve a SeokJin reír, además sus ganas de verlo feliz y complacerlo eran muchas. No entendía muy bien su actuar pero Jin era su mejor amo y señor, él tenía que estar a salvo.
Su voz aparece en su cabeza y de un segundo a otro ya esta frente a él.

—¿Y bien? —pregunta Jin comiendo una manzana.

—Es bastante torpe, la verdad dudo que sea un prodigio. Él pierde nuestro rastro con mucha facilidad, hace seis meses lo tengo dando círculos —explica Jungkook en un bufido.

El bosque sigue con la niebla espesa y abundante, Jungkook se sienta sobre el musgo húmedo y observa a SeokJin.

Sus carnosos labios rosados casi rojos por la fricción con la fruta, piel clara y hebras castañas oscuros. Alto y esbelto. Su simple apariencia es atractiva y hasta cierto punto inocente, sin embargo Jin jamás duda para matar a alguien que le estorba.

—No lo subestimes aún, él es uno de los hechiceros más poderosos. Pude sentir su energía aún estando a kilómetros, sin embargo tengo mis dudas quizá no sea la gran cosa como pienso.

—No lo es, aún no encuentras el destino de tu maestra.

—Se cuál es, sin embargo aún no se el lugar exacto. Al morir ella solo me dijo que buscará en las montañas.

—¿Montañas? —cuestiona Jungkook confundido.

—Si, pero las montañas infestadas de maldiciones y hechiceros asesinos de alto rango. De esos que viven en las sombras.

—¿Cómo es que te involucraste con alguien del bajo mundo?

—Ella me recogió, yo había matado a ese imbécil y todos me buscaban para torturarme bueno —Jin hace una pausa para reírse— me siguen buscando, ella me recogió y fue tan malditamente cruel pero me enseñó muchas cosas, que ahora le agradezco de todo corazón. Ella era la única persona qué realmente me importaba, y ya no está.

Jungkook nota los ojos tristes.

—¿Y después qué harás?

—Iré a visitar a mi tío por supuesto, hace mucho que no voy a casa —dice con sarcasmo.

—Tks... estas loco —afirma Jungkook mirándolo divertido.

—Jeon cuando yo vaya tú podrás ser libre, podrás dejar de seguirme.

—Yo era libre y me volviste a capturar, incluso lograste regresarme la maldición y ahora soy tu esclavo, ya te dije que estaré contigo hasta que muera.

Jin ríe.

—Cierto lo siento en mi defensa no pensé que de verdad fueras real, yo solo te leí en un libro de hechiceros e invoque tu maldición sin esperar nada, pero aquí estás.

Jungkook empuja su lengua en la parte izquierda de su mejilla interna, él esta un poco molesto.
Sus energías que son cuervos aparecen alrededor suyo y justamente a eso se refería, él de verdad que a veces no podía controlar eso, y todo porque SeokJin esta riendo dulcemente, de manera inocente como la gran travesura que hizo al invocarlo.

—Uhm...¿Qué sucede Jeon?

—Nada, solo pasa a veces.

—Ten debes tener hambre —añade Jin dándole dos manzanas.

—Soy una maldición, no como y no...

Jin se acerca y le coloca la manzana en la boca.

—Come Kook.

Jeon escucha a los cuervos a su alrededor chillar y sus mejillas extrañamente calientes.

—Bueno ya es hora de conocer a ese tal Min, ¿no crees? —añade Jin.

PODER MALDITO ✧ yoonjinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora