Cuatro

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No debe haber escuchado al alfa correctamente. Pero en lugar de pedirle a Jungkook que repita sus palabras, se queda sin palabras; su sorpresa se muestra cuando se queda quieto, con la boca abierta. Jungkook parece animado por su respuesta, porque se acerca, presionando sus caderas completamente al trasero del omega. Su nariz está tan cerca de la glándula olfativa de Jimin, tan cerca de enviar al rubio a un aturdimiento impulsado por  su olor y sus palabras

– Un verdadero alfa te haría sentar esa linda vagina justo en su cara, ¿no? Sé que lo haría

El agarre de Jungkook en sus caderas seguramente le dejará un moretón, pero ya no le importa. Técnicamente, Jimin no era el seductor, Jungkook sí lo era, así que esto no contaba como romper su promesa a Yoongi. Joder. Incluso si lo fuera, no hay manera de que Jimin ignore el creciente bulto en los pantalones del alfa. Se está abriendo camino hacia la hendidura de sus nalgas, la tela de los pantalones deportivos de Jungkook es lo suficientemente delgada como para dejar poco a la imaginación. Puede sentir el calor irradiando de su pene mientras lentamente engorda, preparándose con el único propósito de llenar a Jimin por completo.

El omega no puede evitar empujar sus caderas hacia atrás, con los ojos cerrados cuando Jungkook gruñe en voz baja en su oído. Jungkook podría llevarlo aquí mismo (diablos, tal vez podría) y Jimin está tan jodidamente listo para dejarlo. Cuando Jungkook comienza a recibir sus pequeños empujones con pequeños empujones hacia adelante, le duele mucho la nalga. Para empezar, es un recordatorio de la razón por la que está aquí, pero al rubio no le importa. La extensión de su pequeña vagina alrededor del gordo pene de Jungkook sería una distracción suficiente para que no notar el dolor.

– Jungkook... ¿Y si nos desc- oh – No puede terminar la frase, inhalando bruscamente cuando Jungkook comienza a chupar su cuello, su lengua caliente y húmeda moviéndose lánguidamente sobre su piel. El alfa sonríe, sus dientes rozan ligeramente su piel.

– No pasará eso– susurra, sus manos comienzan a recorrer la extensión lechosa de la piel de Jimin – Si estás callado, nadie sabrá que estás siendo follado deliciosamente en esta habitación, ¿verdad? ¿Serás bueno y estarás callado por mí, mm? –Jungkook continúa.

Jimin sólo puede asentir fervientemente, la gran y cálida palma de la mano de Jungkook subiendo sigilosamente por su sudadera. Cuando toma su pecho, Jimin deja escapar un pequeño gemido de vergüenza, y una pequeña mano se extiende para alejar la de Jungkook. El alfa deja escapar un gruñido de confusión.

– ¿Qué pasa, omega?, ¿Qué te tiene tan tímido de repente

Sabe que tiene las mejillas rojas, puede sentir el calor florecer en todo su rostro, por lo que evita girarse para hacer contacto visual. En cambio, habla en voz baja, casi en un susurro.

– T-tus manos son demasiado grandes…

Jungkook arquea una ceja – ¿Mis manos?

– Son demasiado grandes para mi... pecho

Es muy vergonzoso tener que decirlo en voz alta, y Jimin ya se ha sentido bastante avergonzado durante toda esta cita. Cuando Jungkook se ríe en su oído, sólo quiere alejarse más, mientras la humillación se filtra en él. Le encanta su figura; Jimin no es alguien que rehuya el espejo, obviamente . Pero algo acerca de este alfa realmente ha dejado a Jimin en ruinas. Era perfecto, el mejor alfa con el que Jimin jamás podría soñar. Probablemente había tenido tantos omegas a sus pies, y probablemente también eran perfectos. En el lapso de 3 horas, sus diez años de confianza eterna se han reducido a casi nada, todo por un alfa. Tiene un semental puro presionando su pene duro contra él, y ahora lo único que quiere es que lo críen bien. Cualquier cosa que pueda disuadir al alfa de hacerlo, como sus pequeños pechos, es ahora su mayor preocupación.

 [𝐊𝐎𝐎𝐊𝐌𝐈𝐍]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora