﹌﹌﹌﹌﹌﹌﹌﹌﹌﹌﹌﹌﹌﹌﹌ Advertencias: creo que ninguna, soft, manipulación mínima
Contenido: vuelves con alguien con alguien que estas segura de amar, Au moderna, los dos tienen entre 18 y 19.
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Hace no mucho terminaste tu actual relación ya sabes, supuestos problemas, te encontrabas caminando por la media noche, los faroles estaban apagados eso te gustaba, la tranquilidad de la noche era lo mejor que podías tener.
Claro no pasaría mucho para que tu tranquilidad fuera interrumpida por un motor de auto ¿Acaso era...?
Viste bajar de aquel auto a tu ex novio.
Hace dos meses terminamos... ¿Acaso quería volver de nuevo?
—Te amo... ¿si? — esos ojos azules te miraron como si pidieran algo imposible.
—Es media noche Satoru, y eso no significa nada. ¿okey?— decidiste ignorarlo y seguir tu camino, pero el te detuvo.
—Escúchame ____ , no quiero que te vallas, se que no es la primera vez que terminamos.— él sostuvo tu mano y hagacho la mirada. —Extraño tu labial Rojo, te extraño a ti...—
Satoru te observo con tristeza e incluso entrelazo sus dedos con los tuyos. Sus ojos eras lindos, él era lindo, ¿acaso el podía llevarte a un paraíso en llamas? —Ha pasado un tiempo desde que no supe de ti, ¿y ahora vuelves?— tenías dudas, muchas para ser exactos.
—Quiero que te vallas. Pero... quiero que te quedes.—
—Vez, tenemos que estar juntos linda, porque nuestra relación jamás quedará en el olvido.— se acercó a ti con esa mirada hermosa que tanto te gustaba.
—Extraño tu labial Rojo brillante y esa falda ajustada que traes te queda hermosa.— te tomo de la cintura mientras te miraba.
No podías decir lo contrario de él, las camisas blancas que utilizaba eran lo que más te gustaba.
Así eran las cosas, siempre terminaban y volvían, miles de veces ¿Acaso no se cansaban?
—¿ya no iras con otras chicas?— lo miraste con tranquilidad.
Él te observo. —Tienes razón.— suspiro —jamas deje de pensar en ti ¿si?— él sonrió y beso tus labios, el beso era tierno como si dijera la verdad.
Te invadían las preguntas, no sabias si el era sincero. Has estado en esa situación demasiadas veces pero ese cabello largo blanco te hacia imposible no negarte a caer en sus palabras.
—Llévame a casa...— susurraste en medio de aquel beso acidulce.
—Sube al auto.— él abrió la puerta del auto para que entraras, al parecer el viaje iba a ser bastante largo.
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