cw! pet play
♥︎.ㅤ縙
"¡Maldita sea, Todd! ¿otra vez?"
Lunes por la tarde, 8 p.m. Wallace regresó a casa después de un ajetreado día en su trabajo. Se supone que salió a las seis pero aprovechó en ir a comprar cosas para la cena en el supermercado. Estaba muy cansado así que pensó que sería una buena idea preparar algo simple, compró fideos y carne de soya para cocinar una pasta bolognesa, quizá a Todd le gustaría.
O eso tenía planeado hasta que al llegar a casa su cachorro había hecho un desastre. Otra vez.
Él entiende que Todd lo extrañe siempre que se va a trabajar, después de todo el cachorro tiene ansiedad por separación y ha sido bastante difícil lidiar con eso desde entonces. Sin embargo, toparse con la casa patas arriba, con los cojines destrozados repartidos por todo el suelo, la comida y el agua también, y ni hablar de las almohadillas especialmente puestas para que Todd no haga sus desastres fuera de ellas...
Wallace de verdad quería ser paciente con Todd pero esto solo lo complicaba más.
Por otro lado, el cachorro estaba en el suelo, mirando con un rostro nervioso claramente asustado, sus orejas se movieron quedando bajas y su cola se metió entre sus piernas. Sabía que lo que hizo estuvo mal y que probablemente Wallace está muy enojado con él.
Wallace se limitó a suspirar pesadamente y caminó hasta la cocina para dejar las bolsas de compras en la encimera y sacar lo que iba a usar para cocinar. No podía permitir que la situación de Todd impida que puedan cenar adecuadamente. Aunque quizá Todd ya no tendría su adorado premio esta vez.
Todd caminó asustado hasta la cocina, quedándose en el marco de la puerta sin querer entrar y que Wallace le dijera algo feo. Sus piernas flaquearon pero se animó a ir hacía dónde se encontraba el pelinegro cocinando. Desde el suelo observó a su amo quien preparaba la cena con un ceño fruncido y sin mirarlo, eso le hizo sentir una punzada en su pecho.
Fue un chico malo y se lo merece, pero aún así le duele que Wallace no le preste atención y en su lugar lo ignore. De repente sintió como sus ojitos se humedecían y sin darse cuenta ya se encontraba sollozando e hipando mirando hacia el suelo, sin querer que Wallace notase su patético llanto, lo cual fue en vano ya que Wallace se dió cuenta de inmediato apenas lo vió temblando e hipando histericamente.
Wallace suspiró resignado y se agachó a la altura del cachorro, atrajo al chico que vestía tan solo una camisa holgada, y lo abrazó acariciando su cabello rubio y detrás de sus orejas, sintiendo como este le devolvía el abrazo, pasando sus brazos por sus hombros detrás de su cuello. Levantó con todas sus fuerzas al rubio y lo llevó al sofá, sentandolo en su regazo en lo que seguía acariciando su cabecita con cariño.Todd solo escondió su rostro en la curvatura de su cuello permitiéndose llorar.
"Todd..." decía mientras seguía acariciándolo para que se calmara. "Lo siento, bebé, no quería ignorarte."
Todd se alejó aún hipando, mirándolo con sus ojos rojos por el llanto, gruñó suavemente antes de lanzarse a besarlo. Pequeñas lágrimas gruesas caían por sus mejillas mientras seguían besándose, Wallace se encargó de secarlas con su pulgar acariciando la tersa piel a su paso.
"Perdón, no volveré a hacerlo, amo." Todd finalmente habló, con un sonrojo posándose en sus pómulos, abrazando con fuerza al pelinegro quien sonrió ligeramente, besando las lindas mejillas del cachorro.
"Te amo." susurró con su relajada voz grave en su oído.
El rostro de Todd brilló en un intenso sonrojo que lo hizo sonreír aún más.
"Yo también te amo, Wallace..." Escondió su carita en el cuello de su amo con una tonta sonrisa.
⋆⑅˚₊
