Complicated - kivi

Capítulo 19

AVISO: ESTE CAPÍTULO ES ENTERO +18
dicho esto, disfruten ;)

POV Chiara :

-¿Esta vez te vas a controlar? ¿Te vas a detener? - me atreví a preguntarle en un susurro sin apartarme ni un milímetro y devolviéndole la mirada intensa.

Ella respondió acortando la distancia entre nosotras, puso sus manos en mi cadera tirando de ellas para terminar con los pocos centímetros que nos separaban y sus labios se unieron a los míos empezando una danza sensual, húmeda. Sus labios atrapaban los míos a la perfección, en unos segundos su lengua entró en el juego lamiendo mis labios y aumentando el toque sensual del beso. Abrí un poco mi boca dando paso a que nuestras lenguas se encontraran y descubriesen cada rincón de la boca de la otra. De un momento a otro Violeta empezó a andar sin separarse de mí, apretando su agarre en mi cadera y finalmente dándome un pequeño empujón hacia la pared haciendo que se me escapara un gemido. Separó nuestros labios finalizando el beso mordiéndo los míos para bajar los besos hasta mi cuello, donde empezó a morder y chupar haciendo que se me erizara todo y mandando una corriente hasta mi centro. Yo respondí bajando mis manos que estaban en su nuca, pasaron por su hombro, bajaron por su espalda apretando el agarre y bajaron hasta su culo recreándose en él haciendo que Violeta jadeara chocando su aliento en mi cuello. Sus manos se posaron en el filo de mi vestido acariciando mis muslos por debajo de este. Me miró como pidiendo permiso para quitarlo y yo asentí notando cómo sus manos iban acariciando mis costados a medida que el vestido iba subiendo, no apartó su mirada de mis ojos en ningún momento y yo me estaba derritiendo con su tacto y su mirada.

Una vez el vestido desapareció quedándome sólo en tanga Violeta dio un paso atrás, posando su mirada en mi cuerpo mirándome de arriba a abajo. Noté un cambio en su mirada, seguía habiendo de deseo pero ahora también había un toque algo más suave, un toque de adoración. Volvió a acercarse posando su mano derecha en mi cara acariciándome la mejilla y su otra mano dejando trazos delicados en mi cintura.

-Eres preciosa Chiara. - me dijo volviendo su mirada a mis ojos - De verdad, eres... La luz de las velas te sienta tan bien. - dijo mientras la mano que acariciaba mi mejilla quitó un mechón de pelo de mi cara - Te quiero.

Su mirada bajó a mis labios y volvió a unirlos a los míos, esta vez era un beso diferente, seguía habiendo deseo pero también había amor, tenía más equilibrio entre lo lascivo y lo dedicado, entre la lujuria y la sencillez. Tras unos segundos sus besos pusieron otro rumbo, se dedicaron a aprenderse de memoria mi cara, pasando por mis mejillas, mi frente, mi nariz, pasó por mi oreja dejando un mordisco y bajando hasta mi cuello, sus manos me acariciaban los costados, yo me encontraba en una nube. Se me revolvió todo cuando sus besos estaban llegando a mi pecho, movió una de sus manos de mi costado a una de mis tetas, acariciándola y recreándose en ella, su boca llegó hasta la otra teta chupándola y dejando besos haciendo que arqueara la espalda y soltara un gemido. Siguió bajando acabando de rodillas delante mía y me miró a los ojos para volver a pedir permiso. Empezó a bajar poco a poco mi tanga mientras iba besando el lado de una de mis piernas. Al quitarme del todo el tanga subió lentamente dejando besos por mis muslos y recreándose en ellos como queriendo aprenderse cada rincón de mí y acabó dándome un beso en el tatuaje que tengo en la ingle. No la dejé seguir, yo estaba que no aguantaba más, quería besarla, quería tocarla, quería hacerle sentir todo el amor y deseo que me estaba haciendo sentir a mí. Así que le agarré de una mano para subirla y volver a estar a mi altura y la besé. La giré haciendo que su espalda chocara con la pared y jadeara sin apartar sus labios de los míos. Hice el mismo recorrido que ella, intentando trasmitirle lo mucho que la quería. Le quité la camisa disfrutando del tacto suave de su piel, tenía la piel caliente, irradiaba calor. Le quité una tira del sujetador besando el recorrido de ésta e hice lo mismo con la otra. Lo desabroché y me recreé en su pecho notando cómo este subía y bajaba descontroladamente. Sin separarme de esa parte de su cuerpo le desabroché el pantalón. Fui bajando mi boca a la vez que mis manos bajaban su pantalón a la vez que sus bragas y una vez le quité esas prendas volví a subir hasta su boca lentamente dejándole besos por todo el camino. Al volver a su boca ella puso su mano entre mis tetas como parándome.