Sí me dices que si. | RYEJI |

Capítulo 18

RYUJIN.

Ryujin es excelente cuando trabaja bajo presión, es analítica, fuerte y siempre sabe salir de malas situaciones.

Mi-Kyung solía decirle que siempre ve la luz al final del túnel, incluso en los casos más difíciles.

Sin embargo este túnel le parece particularmente obscuro.

Irene se portó increíble, les dijo toda la verdad y Ryujin sabe que esta haciendo lo que esté en sus manos para ayudarles.

Eso no quita el hecho de que está muy asustada, se siente como si lo único que retumbara en su mente fueran las palabras te lo dije.

Palabras que (para sorpresa de nadie) suenan exactamente como la voz de Rosé.

Están afuera de la oficina de la directora esperando a Lia, Yeji está sentada en el sillón con los ojos cerrados.

Ryujin quiere ir, sentarse y decirle que todo va a estar bien, pero ella no lo sabe a ciencia cierta.

No puede creer que su novia puede perder su beca, peor aún, puede tener que devolverlo todo.

Al menos con eso sí puedo ayudar.

Cierra los ojos y respira, Yuna está frente a ella diciendo cosas que seguro no tienen sentido, sabe que es por ayudar pero de pronto Ryujin se siente muy cansada.

Al parecer Lia ha terminado de hablar con su madre, porque sale de la oficina y se sienta en el sillón junto a Yeji.

Trae un sobre en las manos, Yeji solo se recarga en el hombro de su amiga.

Ryujin se gira devuelta a Yuna que sigue hablando, al parecer gruñe y asiente en los momentos adecuados porque su amiga no parece notar que ella no está
escuchando nada.

O tal vez Yuna es demasiado amable para decirlo.

"Ryujin." La pelinegra gira y Yeji está ahí, se ve igual de cansada. "Voy a buscar a Chaeryeong y Karina, quiero contarles todo. ¿Está bien si las vemos en tu casa?"

Ryujin siente como si esa reunión sonará a un funeral, pero no puede hacer otra cosa más que asentir. "Claro. Nos vemos ahí."

Yeji se acerca y pone la frente sobre su hombro. "Te quiero."

Incluso con todo Ryujin sonríe y besa la cabeza de su novia. "Te quiero Yeddeong."

Yeji se va y se toma unos segundos para ver cómo lo hace, se gira y sus amigas están hablando.

"Vamos a mi casa."

Ambas asienten y todas caminan.

Después de unos buenos 15 minutos caminando por fin llegan, en todo el camino Ryujin no puedo quitarse la sensación de estar siendo juzgada.

La verdad es que sabe que al menos los profesores van a enterarse y tal vez lo hagan algunos alumnos.

Y aunque no es el mayor de sus problemas no puede evitar sentirse ansiosa al respecto.

Se sienta en el sillón, Yuna está diciendo algo sobre hacer bocadillos, sabe que puede arreglarselas sola así que solo cierra los ojos.

Se siente tan agotada y hay una cosa que pesa en su cabeza desde que estaban en la oficina de Irene, ella tenía razón, aquí Ryujin es el adulto.

Y si bien no se arrepiente de nada de lo que pasó se siente tremendamente culpable.

Ella tiene una carrera, es reconocida y exitosa.