después de un malentendido Jimin y Yoongi terminan su relación...
¿Qué pasaría cuando luego de 7 años vuelven a encontrarse?
¿el amor entre ambos seguirá existiendo?
¿podrá Jimin volver a enamorar a su único y primer amor?
¿podrán solucionar el m...
Eran aproximadamente las tres de la tarde, Yoongi estaba en el salón de baile donde se realizaría la ceremonia. La organizadora de daba detalles de donde iría cada cosa y le preguntaba si quería hacer algún cambio. No faltaba mucho para la boda, dos meses, solo dos meses para que se una a Jackson.
— habrá una enorme arreglo floral de rosas en el centro de su mesa.
— ¿rosas? Pero yo quería-
— las rosas son perfectas para tu boda — interrumpió su madre — que sean rojas y blancas.
— aquí traigo unos diseños de arreglos florales, quizás pueda gustarles algunos.
— por supuesto
La señora Min junto a la organizadora vieron de un catálogo los miles de diseños. Yoongi solo miraba sin poder emitir opinión alguna, parecía más la boda de su madre que de él mismo.
Sabiendo que nada de lo que diga iba a ser escuchado ni tomado en cuenta, salió de salón hasta el jardín. Se detuvo frente a una mediana, pero lujosa piscina, ¿para qué? Si nadie me metería a bañarse. Tenía en cuenta que tenían mucho dinero para gastar en lo quisieran, pero al parecer su madre no exageraba cuando dijo que su boda tendrá todo de todo, hasta cosas innecesarias, como una piscina, por ejemplo.
— aquí estás — apareció su madre detrás de él — las flores y el diseño del centro de mesa ya están elegidos
— madre, ¿habrá algo en yo si voy a poder involucrarme?
— ¿a que te refieres?
— que esto parece más tu boda que la mía.
— Yoongi, solo quiero que todo salga perfecto
— si así fuera, desde un principio me hubieras dejado a mi escoger lo que quería
La señora Min se cruzó de brazos, sabiendo a que, mejor dicho a quien se refería su hijo — tu nunca fuiste alguien que tomara buenas decisiones, hijo
— nunca me dejaron tomar una, siempre tenía que hacer lo que ustedes querían
— Yoongi, si hubieras seguido tus propias decisiones, créeme que estarías en la calle, dime cuando has tomado una buena decisión.
— ¿en la calle? Por favor madre, fui yo quien sacó adelante la empresa, ¡porque si hubiera sido por ustedes, realmente estaríamos en la calle!
Yoongi sintió con su madre levantaba su mano derecha, no pudo reaccionar cuando la palma delgada de su madre se estrellaba en su mejilla derecha.
— que sea la última vez que me levantas la voz, ¡soy tu madre!
— ¡una madre que lo único que hizo por su hijo es aprovecharse de él y destruirle su vida separandolo de la persona que ama!
— dime que no te refieres a-
— ¡SI! — de su ojo izquierdo logró salir una lágrima que reslvalo por su mejilla — se que Jimin jamás escribió esa carta, fui un estúpido al creer en ustedes. Por mucho tiempo odié a la persona que más amaba
— ya basta con eso — rodó los ojos ya cansada de la misma situación — vienes repitiendo eso una y otra vez. No fue nuestra culpa que él se fuera sin decirte nada.
— él jamás les hizo nada malo, siempre fue bueno y sincero, ¿acaso no les bastaba con el amor y respeto que me tenia?
— cariño — se acercó a su hijo — de amor no se vive, ¡acaso crees que con amor y respeto tendrías todo lo que tienes!
— no, pero lo tendría a él
— tienes a alguien mejor, conformate con eso — respondió dándose media vuelta
Yoongi cerró ambos puños con mucha fuerza, se sentía impotente, frágil, molesto, con ganas de tirar todo a la mierda. Él ya no era un niño, él podía decircir lo que fuera de su vida. No era un títere que podía ser manejado al antojo de los demás, estaba cansado de que decidirán cada cosa que tenia que hacer, como si su vida no debería de depender de él, sino de las decisiones de los demás.
Ya no aguantaba más, solo quería que todo esto fuera una pesadilla. Quería despertar en un mundo donde sus padres no fueran unos hijos de puta con él, quería despertar y que estuviera junto al amor de su vida, quería despertar y ser feliz como lo sería cualquier persona. Eso era lo único que quería... ser feliz. ¿Era mucho pedir?
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Jimin tenía una enorme sonrisa en su rostro, miró los girasoles en el asiento de copiloto. Le daría una linda sorpresa a Yoongi, sabía que adoraba aquellas flores. Así que, que mejor que alegarle su día a la persona que amas, con sus flores favoritas.
Cuando estacionó su auto a unos metros de la casa del pálido, puedo notar a Yoongi que caminaba cabizbajo hasta la entrada, algo le pasaba, estaba seguro de ello. Con esa mirada y su forma de caminar podía saber que algo le había pasado. Bajando lo más rápido que pudo fue al encuentro de su amado.
Cuando estuvo frente a él notó como de los ojos rojos salían miles de lágrimas. ¿Por qué lloraba? ¿se habrá pelado con Jackson? Acaso él se enteró que ellos...
— ¿Yoongi?
— que haces aquí — respondió serio
— Vine a verte, quería decirte-
— ¿QUÉ? QUE QUIERES DECIRME, ¿QUE NO ME CASE CON JACKSON? ¿QUE ME QUEDE CONTIGO? — gritó, alejándose fruscamente de él — YA NO SE QUE HACER, TODO EL MUNDO ME DICE QUE HACER, ¿ACASO NO TENGO OPINION PROPIA? ¡DIME AHORA QUE QUIERES QUE HAGA POR TI!
Jimin se quedó en silencio mientras veía en silencio a Yoongi llorar, ¿que había pasado? ¿Por qué le decía esas cosas? Él solo había llegado a darle un presente, talvez había llegado en un mal momento.
