You're in love (Timeless)

Era del barro y de lo amarillo : Inicio

You're in love
(Timeless)

Con los pies dolientes, y con listones rojos me di cuenta.

Tengo el corazón ejercitado, atado y domesticado, ciego
para que solo pueda ver un único camino amarillo más no dorado.

Soy como Dorothy, con zapatos demasiado estrechos bañados en sangre recorriendo el camino establecido.

Amarillo pero nunca dorado. Sin envidias.

Con un músculo palpitante y sonriente que lucha contra él no sentir.
Demasiado grande para el enano hueco en mi pecho, pareciera que colgara de un solo hilo
y que con cada desvío en el camino amenazara con caerse de mi cuerpo y formar el suyo
propio.

Probablemente si le salieran piernas y brazos me tomaría entre sus manos y me
gritaría hasta que su garganta sea tan rojas como mis pies y zapatos.

Tal vez sentiría un cuerpo ajeno más propio que el mío.

Tal vez no amenaza con caerse y rodar porque el agujero en mi cuerpo
es demasiado pequeño para su gran sentir, tal vez solo amenaza con hacer de mi pecho
un hogar adecuado para su pensar.

Tal vez me obligue a salir del camino amarillo.

Es aterrador como un espejo que refleja no mi cuerpo sino mi iris.

⋆⭒

prólogo
I

La vida de Wei Wuxian, al igual que la de todas las personas en castas inferiores, está compuesta por constantes.

Cuando era pequeño su familia no se quedaba en un solo lugar. Su mamá decía que eran aventuras, su Baba sonreía y lo tomaba entre sus bronceados brazos y partían hasta el más allá. Mamá acariciaba su pelo mientras su Baba hablaba con esa voz grave y serena tan característica suya sobre lo que alguna vez fueron las estrellas, señalaba la única que había en el vasto cielo negro y decía "Ese es el hogar, síguela y dobla a la derecha, A-Ying. Esa es la estrella del hogar".

Las constantes en su vida eran simples; viajaba con Mamá y Baba, iban desde lugares con calles limpias y elegantes a lugares con gente durmiendo en las aceras, sonreían, le hacían cosquillas y le contaban historias que tenían como único confidente a la luna. Entonces sus papás murieron y todo cambió.

Sabía que sí iba a la calle VVG¹  encontraría perros que podían sacarle la oreja de un mordisco, sabía que debía evitar el sur de la ciudad cuando llegaba cierta hora del día, sabía que hacerle favores a las lindas hermanas a veces le traería un techo cálido por la noche. Sabía que las acciones tienen consecuencias.

Entonces conoció a Jiang Fengmian, un hombre alto y algo delgado, normal para lo que era la casta 4. Tenía una sonrisa cálida y manos callosas que trataron de brindarle seguridad.

Wei Ying fingió que no lo escuchó llorar cuando lo encontró. Solo tomó sus manos y dejó que, anonadado, lo llevaran a casa. Nunca había tenido una casa, un hogar claro, pero no una casa, solamente algunas posadas, muchos departamentos de amigos de sus papás, algunos barcos o lugares abandonados, pero nunca una casa, mucho menos una cuál llamar suya. Entonces el tiempo pasó rápido y Wei Ying se recuperó del shock inicial. Seguía evitando la calle VVG como la peste, pero ahora tenía constantes que no cambiaban ni lo harían nunca.

Wei Wuxian  tiene veinte años, pertenece a la casta 4, es un omega, es el Shidi de su Shijie y el Gege de su Shidi.

Wei Wuxian y al igual que todos los de su casta vive del arte, trabaja en el lugar que le de aunque sea unas pocas monedas al día para pagar los altos impuestos y toca el dizi y la viola1  hasta que sus manos gritan.

Wei Wuxian es quien proporciona el segundo mayor sustento económico a su hogar, es quien tiene que lidiar con las inseguridades de Madam Yu, agachar la cabeza y soportar un par de bofetadas.

A veces las cosas cambian, está dentro de la naturaleza humana; hay días en donde cancelan sus shows, sus clases particulares o actos y sabe que este mes tendrá que comer menos, y había días en donde no podía predecir el estado anímico de sus tutores, los días no son iguales entre sí, son variables y a veces impredecibles.

Pero como las cosas cambian, hay cosas que no lo hacen. A-Ying tiene veinte años ahora y sabe que cuando está mal su Shijie lo esperará con sopa de raíz de loto y una sonrisa (es mayormente agua, nadie dice nada. Es perfecta), sabe que Jiang Cheng no verbaliza sus emociones pero es el primero en defenderlo cuando hay un problema. Hay muchas cosas en su vida que no cambiarán.

Han pasado dieciséis años desde que murieron sus padres y la constante de la que siempre ha estado seguro es que ama su hogar.

VVC¹ Referencia a Vincent van Gogh