Cuenta Sergio mentalmente mientras mira fijamente la barra de plástico que tiene en la mano. Una línea roja aparece en el pequeño visor. Cuatro. Cinco. Seis.
Solo una línea.
Se sienta en la tapa del inodoro y mira al techo. Después de haber tenido aquel aborto espontáneo, no habían intentado tener ningún bebé, el omega tenía miedo de que todo se volviera a repetir, pero unos meses después de terapia cambio de opinión. Ayer, mientras repasaba las fechas de las clases que impartía, que tenía reservadas para la semana siguiente, se dio cuenta del retraso en su celo de un mes.
-¿Checo? -La voz de Max viene del otro lado de la puerta del baño.
-Es negativo -dice, intentando sonar despreocupado. Para ocultar su decepción. Secretamente, esperaba que fuera positivo. La sola idea de tener un bebé de Max le hacía saltar de alegría. Un hermanito para su pequeño Yuki. Estaba acurrucado junto a Max cuando le dijo que tenía que hacerse la prueba de embarazo. Su cuerpo se quedó inmóvil por un momento y luego Checo se apretó contra él con tanta fuerza que apenas podía respirar.
La puerta se abre y Max entra en el baño.
-Está bien. -le dice acariciando la mejilla y le quita la prueba de la mano. La expresión de su rostro parece relajada, pero lo ve en sus ojos, él también lo esperaba. -Seguiremos intentando. Cuando ...-Mira el palito de plástico que tiene en la mano y se tensa-. Checo. ¿Cuántas líneas debe tener?
-Una. Significa negativo.
-Pero aquí hay dos.
El omega salta del inodoro y le arrebata la prueba de las manos.
-Pero si solo había una. Dame la caja, por favor.
El alfa le pasa la caja y lee rápidamente las instrucciones hasta que llega a la parte en la que dice que hay que esperar al menos cinco minutos. Cuando lo leyó la primera vez, pensó que decía cinco segundos.
-Es positivo -dice Sergio entrecortadamente mirando a Max. Él lo mira fijamente-. Vamos a tener un bebé.
Lentamente, su mirada se desliza por su pecho hasta llegar al vientre del omega. Respira hondo y se arrodilla frente a el castaño. Sus grandes manos tiemblan cuando toma el dobladillo de su camiseta, lo sube y lo besa justo por encima del ombligo. Luego apoya su mejilla en el vientre, rodeándolo con los brazos.
...
-Ya te he dicho que no hago exámenes gineco obstétricos -suelta doc.
Doc es uno de los tres médicos de confianza que trabajan para Sainz y empleados.
-Mañana tenemos cita con un obstetra -dice Max y empuja a Doc lejos de la puerta para que Sergio y el rubio puedan entrar en su consulta-. Pero necesito saber que todo va bien. Ya.
-Estás exagerando.
-Me importa una mierda. -Con las manos agarrando suavemente a Sergio por debajo de los brazos, lo sube a la camilla-. Puedes empezar.
Doc niega con la cabeza y toma asiento, acercando el ecógrafo hacia él.
El cabellera rubia se fijan en la escena que tiene delante mientras observa cómo unta en el estómago de Sergio con una sustancia viscosa y mueve el aparato por encima de la cintura de sus pantalones. Lo desliza de izquierda a derecha y luego lo gira un poco, sin perder de vista el monitor y pulsando algunos botones de la unidad móvil.
-Yo diría que están en la quinta semana. Los dos parecen estar perfectamente -dice, y luego mira a Sergio.-. Y tú también pareces estar bien.
Max parpadea confundido.
-¿Los dos? ¿Tanto Checo como el bebé?
-No. Los dos bebés.
La cabeza de Max se inclina hacia un lado y mira hacia su omega, que contempla el monitor con una amplia sonrisa en la cara.
-¿Estás seguro? -susurra el omega.
-Sí -dice Doc al mismo tiempo Max también habla.
-. ¡No! - ambos se vuelven hacia él mirándolo. -Hazlo otra vez. -apunta el alfa con el dedo al ecógrafo mientras el terror se apodera de él interiormente.
-¡Estoy bastante seguro que sé contar! -exclama el médico y le golpea el impreso de la ecografía contra el pecho, señalándolo con el otro dedo-. Uno. Dos.
-¡Otra vez!
-¿Max? -Sergio le agarra del antebrazo-. ¿Qué está pasando?
El alfa deja de mirar al beta y ahueca el rostro de su pareja entre sus manos.
-Esto es peligroso, kleine zon. Y tú eres tan pequeño. ¿Y si pasa algo?
El omega acaricia la mejilla derecha del alfa y le sonríe.
-Estaré bien. Hay gemelos en casi todas las generaciones de mi familia, y nadie ha tenido nunca ningún problema. No entres en pánico.
-No estoy entrando en pánico. No me asusto. - dice Max y le lanzo una mirada por encima del hombro a doc-. ¿Hay que ingresarlo en un hospital? Iré directamente allí.
-Max. -Sergio tira de su camisa.
-¿Puede ir caminando? -continúo el alfa-. No, mejor lo llevo yo.
-¡No voy a dejar que me ingresen a un pinche hospital, Emilian! -Checo exclama, sujetándolo de la barbilla y le gira la cabeza para que lo mire.-. Démosle las gracias a doc y volvamos a casa.
-Checo...
-No te aconsejaría enfurecer a un omega embarazado de gemelos, Max. -interviene doc.
-No lo hará. -le dice el castaño se inclina hacia delante y presiona sus labios contra los del rubio. -Relájate. Todo va a salir bien.
...
Y pues si, efectivamente todo salió bien. Ahora sí mi gente este fue el último especial, lo prometo. Solo fue para agradecerles las 120k de lecturas. 😼🤍
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Cambiando de tema, como ven lo de Carlos, Lewis y Ferrari?
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Wow que recuerdos este fue subido por las 120k de lecturas y ahora tenemos más de 300k+ de lecturas... Gracias 💙.
