Reencarne En El Apocalipsis

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Capítulo 46: La pretenciosa perra del té verde se unió

En la silenciosa noche, los pasos fuera de la ventana eran inusualmente claros. Fu Shinan rápidamente agarró la barra de hierro que Ji Zan había colocado sobre la mesa de café y se acercó con cautela a la ventana.

Alguien susurró: "Esto era originalmente un centro turístico, no debería haber nadie adentro. No demos vueltas, ¿qué opinas, Yu Jian?

Yu Jian maldijo: "Maldita sea, no hay un buen lugar. No les cuidemos más la entrada, busquemos rápidamente una casa donde dormir. Quién sabe si sobreviviremos mañana".

La persona a su lado, consciente de que la mujer de Yu Jian había sido secuestrada por otra persona, trató de apaciguarlo: "Haremos lo que digas. Mira todas estas casas, elige una y yo te seguiré".

El corazón de Fu Shinan se tensó de inmediato. Si Yu Jian se atreviera a entrar, definitivamente le aplastaría la cabeza con la vara. Pero después de un rato, escuchó el sonido de la puerta y Yu Jian y su grupo eligieron la casa vecina.

Fu Shinan dejó escapar un suspiro de alivio. Al menos tenía algo de sentido común. Pero justo cuando se relajaba, de repente llegó un grito desde arriba: "¡Ah! Una rata..."

La voz de Yu Jian volvió a resonar: "Maldita sea, en realidad hay alguien en la casa de al lado".

Ji Zan y los demás también se despertaron y corrieron escaleras abajo justo cuando se abrió la puerta de una patada.

Yu Jian extendió la mano para tocar el interruptor de la luz, pero vio una figura aparecer ante sus ojos y fue pateado directamente al suelo. Su compañero, al ver que pateaban a Yu Jian, inmediatamente se arrodilló, "¡No me mates, solo soy un lacayo!" Entonces, se encendieron las luces.

Al ver a Fu Shinan de pie junto al sofá, Yu Jian maldijo: "Perra, tú también estás aquí. ¿Tuviste algo que ver con esto?

Fu Shinan le dio una patada en la mandíbula y le arrancó uno de los dientes: "Con esa boca tuya, tarde o temprano te costará la vida".

En ese momento, Bai Lianhua también bajó corriendo y, al ver las dos figuras en el suelo, gritó de nuevo: "Hermano Ji, ¿quiénes son? ¿Son zombis?

Fu Shinan realmente deseaba tener una aguja en la mano para coserle la boca a esta mujer. Si no hubiera gritado de repente, estas personas no habrían entrado.

Ji Zan inmediatamente se giró y la fulminó con la mirada: "Cállate". Luego le hizo un gesto a papá.

Fei, "Wang Tianba también está aquí, ten cuidado".

Da Fei y los demás asintieron y salieron corriendo con los dos individuos. Sin embargo, justo cuando llegaban a la puerta, escucharon el sonido del motor de un auto, y al final, solo lograron capturar a una mujer desaliñada.

La mujer no era otra que Shi Chan'er. Cuando vio a Yu Jian, se volvió loca y corrió hacia él, abofeteándolo y golpeándolo, "¿Eres siquiera humano? ¿Abandoné a mis padres por ti y ahora, por un coche, me entregaste a Wang Tianba? ¡Tu bestia!"

Yu Jian también se puso furioso. Agarró a Shi Chan'er por el cabello y la abofeteó dos veces: "¿Tienes el descaro de decir eso? Puta, tú misma sedujiste a Wang Tianba y, sin embargo, ¿me culpas? ¿Por qué no me di cuenta antes de lo bien que eras en la cama? Jodidamente quería estrangularte.

Shi Chan'er puso los ojos en blanco por estar asfixiada y luego notó a Fu Shinan. Ella inmediatamente la saludó repetidamente.

Fu Shinan miró con indiferencia, sin responder. En su vida anterior, Shi Chan'er probablemente la había mirado con la misma fría indiferencia cuando murió, ¿verdad?