Érase una vez un osito que era muy pero que muy glotón. Le chiflaban todas las golosinas, y los bombones que compraba su mamá, por eso mismo, su mamá tenía que guardar bajo llave todos y cada uno de los dulces de la casa.
—Están muy caras las golosinas. -le explicó su papá. Sino comes de una manera más razonable, tendré que castigarte.
Pero el osito Drilo no era nada razonable y no era consciente de lo que le decía su papá.
Un día especial, el día de su cumpleaños, su mamá le regaló 2 tarros llenos de golosinas y chocolates, para así ponerle a prueba y ver como se comportaba.
Drilo, se lo comió todo en un abrir y cerrar de ojos. Enfermó durante 6 días.
Se sentía tan pero tan mal, que no volvió a pedir, ni siquiera a comer dulces en toda su vida.
Así fue como el osito Drilo, aprendió por si mismo a no abusar de las cosas, ya que a fin de cuentas todo tiene sus consecuencias, al final acabó aborreciendo los dulces. Todo en exceso es malo y perjudicial para uno mismo. 🐻
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𝐂𝐮𝐞𝐧𝐭𝐨𝐬 𝐂𝐨𝐫𝐭𝐨𝐬| 𝐌𝐢𝐫𝐢𝐜𝐡𝐚𝐫𝐜𝐞
Short Story📚 𝘾𝙐𝙀𝙉𝙏𝙊𝙎 𝘾𝙊𝙍𝙏𝙊𝙎 📚 TODOS estos cuentos están escritos por mí y adaptado para niños. *Actualizo cada semana, 𝐍𝐎 𝐞𝐬𝐭á 𝐭𝐞𝐫𝐦𝐢𝐧𝐚𝐝𝐨.* 𝐕𝐨𝐭𝐚 𝐲 𝐝𝐞𝐣𝐚 𝐭𝐮 𝐜𝐨𝐦𝐞𝐧𝐭𝐚𝐫𝐢𝐨.⭐