Solo me queda fingir que jamás te vi.
Solo me queda fingir que jamás me viste.
Solo me queda fingir que jamás me buscaste entre la gente.
Solo me queda fingir que jamás me miraste a través
de cada reflejo que existiera en nuestro camino.
Solo me queda fingir que jamás me sonreíste.
Solo me queda fingir que jamás elegiste mirarme a mí
antes que a la mujer que caminaba a tu lado.
Solo me queda fingir que jamás te conocí.
Y lo más doloroso, es que solo me queda fingir,
que jamás te he amado.
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De Alma a Alma
PoesíaCada escrito es el reflejo de un amor incondicional e incomparable. Un amor correspondido, pero a la vez, esquivo y cobarde.