¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Un hombre vestido con un saco café miro por la ventana al escuchar un fuerte golpe.
"Molestó, molestó, muy molesto".
El hombre emurmuro para si mismo en un tono enojado pero al mismo tiempo frustrado.
"Les dije claramente que no, ¿Por qué demonios hacen esto?".
"Que... Molesto~".
El hombre se tomó del cabello con frustración.
"Quiero que desaparezcan, es mi casa, está es mi casa".
"¡ES MI HOGAR!".
...
Quedándose un momento en silencio, el hombre camino asta la ventana de la habitación donde estaba, y miro a la mano de obra afuera.
"Mátalos".
Una sola palabra seca, pero que desencadenó un sin número de zumbidos alrededor del hombre.
Un segundo después la ventana fue abierta bruscamente y millones de insectos salieron volando o arrastrandoce por la pared de la mansión.
Arañas, mosquitos, avispas, tarántulas, cucarachas, sien pies, gusanos, todo tipo de insectos salieron de la ventana ante la atenta, y aterrorizada mirada de los trabajadores que intentaron uir del lugar.
Sin embargo, para desgracia para ellos y el resto de trabajadores, los mosquitos llegaron más rápido que ellos.
En menos de un minuto los cuerpos desprovistos de toda su sangre, fueron devorados por arañas, gusanos y hormigas hambrientas.
Lo único que quedó de ellos fueron sus huesos.
"Paso".
"Paso".
"Paso".
Asercandoce lentamente, el hombre responsable de tal crueldad, se detuvo frente a uno de los craneos.
Tomándolo con su mano levemente azul, el hombre lo miro con una cara aburrida.
"Lleven la sangre a su madre".
Ante la orden los mosquitos se adentraron a la casa nuevamente, unos segundos después, un pequeño temblor sacudió el concreto bajo sus pies.
"Haré pagar a los que intentaron destruir nuestro hogar".
Los ojos del hombre se inyectaron en sangre, una sonrisa cruel se extendió en sus labios agrietados.
"¡Abuelo~!".
"Crack".
El hombre termino su oración aplastando el cráneo que sostenía en su mano con solo fuerza bruta.
Lo último que se pudo oír fueron los pasos del hombre mientras se retiraba en la oscura mansión, seguido de SERCA con un enjambre de insectos.
