Queridos tíos

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California -1 día.

Todo esta empaquetado y lo único que he dejado en la bolsa de mano para el viaje es un libro y un par de películas para poner en el dvd del asiento.

-Gabby amor mío- vale cuando mama dice cosas bonitas es porqué mama quiero algo.

-Ajá...?

-Tía Rose y tió Jamie han venido ha despedirse de su preciosa sobrina- me cago en la.

-Vale mami en seguida bajo.

Tía Rose y tío Jamie eran los tíos más irrespetuosos del mundo, pero tenía que aguantarlos porqué eran familia. Maravilloso.

Empiezo a bajar las escaleras, bastante lento obviamente, intentando atrasar lo más posible la nefasta realidad, que son, en fin, mis tíos.

-¡Gabriella preciosa!- chilla mi encandalosa tía.

Mi madre me mira como pidiendome perdón, per en realidad es ella la pobre que se ha criado con esa mujer.

-Tía...-dijo con falso entusiasmo mientras estampa sus labios abotoxonados en mi cara-

-Dulce niña- dice mi tío dandome un corto abrazo.

Vale, aquí parecen normales, pero a los cino minutos estallan, nunca falla.

-Mami preparo cafés, ¿vale?

-Me parece perfecto amor

Me dirijo a la cocina mientras preparo los cafés.

Esta es la cuenta atrás de los cincos minutos de ser agradables.

-Estan listos- canturreo mientras me acerco a la mesa.

-Cariño cuidado no se te caigan- dice comprensiva mi madre.

Cuando voy a agradecerle mi tía suelta una de la suyas:

-Por favor Karen, ojalá que se les caigan encima, así tendrá una excusa para quitarse esa bñusa pasada.

Mi madre y yo nos miramos cómplices y reímos falsamente, así es más fácil sobrellevarlo.

-Hija, ¿sabes que te puedes quitar ese lunar con una operación?

-Ajá...- y volví a reír como 40 veces con las repetidas frases de mis tíos. Ya casi me las sé de memoria.





Mi madre cierra la puerta y suelta un largo y sonoro bufido.

-Vivaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa-chillo mientras me tiro dramáticamente al sofá.

-Lo siento cariño, los he avisado el día antes de irnos, no creí que vinieran.

-Tranquila mama, lo de hoy compensa los próximos años de vida californiana, oh yeah, oh yeah- bailo torpemente tumbada en el sofá.

-Exacto pequeña.

-PAPAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAA-grito de repente haciendo que mi madre de un respingo.

-QUEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEE-grita él, de tal palo tal astilla supongo.

-HAS LLAMADO A LOS DEL VUELO PARA PREGUNTAR SI PODEMOS LLEVAR A BARTOLO...-

-¡Por el amor de Dios!¡Joseph baja ahora mismo, TENED UNA CONVERSACIÓN CIVILIZADA!- termina mi madre.

Mi padre empieza a bajar las escaleras cauteloso. Si las miradas mataran, mi padre estaría siendo comido por gusanos ya.

-Mi amor perdoname- besa la mejilla de mamá y le da un golpecito en el trasero.

-Dios buscaros una habitación-río acariciando a Bartolomeo.

-Te pasas- intenta decir serio mi padre- al ser un perro muy obediente nos dejan llevarlo en el avión. Pero a tu lado, solo a ti te hace caso.

-YUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUPI.

-Necesito otra familia- susurra mamá.

-Os quiero- y un cursi pero amoroso abrazado cierra la conversación.




Mingatur: Hola lectorciiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiitos/as

Que cursi queda eso.

En fin, téneis en multimedia una foto de los tíos de Gabby.

Y si te pregunta, sí, sabes conducir un tractor.

ciiiiiiiiiiao


Good luck Gabby (you'll need it)-pausada-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora