Zoro... (Zosan)

6. Tiempo después

A medida que iba pasando el tiempo Sanji se notaba más cercano a Zoro y viceversa. Ambos estaban compartiendo más juntos, Zoro siempre lo estaba cuidando en su recuperación y a veces se llegaba a sentir mal de nuevo, pero ahí siempre estaba Sanji para apoyarlo en eso, aunque en parte también era algo duro para él aún así le dió apoyo a Zoro en todo momento. Luego de lo que pasó en el baño no se volvió a mencionar el tema

- Si yo tal vez no me hubiera metido con ese tipo... Si tan solo yo ... - Se repetía normalmente Zoro en esas situaciones de culpa y angustia

- Marimo, mírame - Le respondía Sanji posando sus manos en las mejillas del contrario -Ya pasó, ya estoy bien. No te preocupes por mi, no fue tu culpa -

Así fue pasando el tiempo hasta que notoriamente Zoro mejoró en gran medida, Sanji poco a poco podía caminar mejor, su hombro se recuperó más rápido. El ambiente en el Sunny estaba mejor que nunca

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- ¡Maldito marimo! ¡¿Quién te crees para hablarme asi?! ¡¿Ah?! - Luego de lo sucedido Sanji y Zoro comenzaron a pelear y descutir más de lo común, aunque fuera normal verlos pelear ya se les estaba haciendo algo raro a algunos de los Nakamas, especialmente a Nami y Robin. Esos cambios los hacia ver algo raros entre ellos mismos

- ¡No te golpeo porque aún estás mal!- Decía Zoro haciendo sus típicas muecas de desagrado mientras miraba a Sanji a la cara

- De igual forma ya es hora del almuerzo, ya no tengo porqué desperdiciar mi tiempo contigo - Sanji se estaba dando una media vuelta dejando con más ira a Zoro

- ¡¿Ah?! Eres tú el que comienza y el que luego dice que no perderás tu tiempo conmigo, ¡¿Quién te entiende?! -

- ¡NAMI-SWAN, ROBIN-CHWAN! ¡¿QUÉ QUIEREN PARA EL ALMUERZO?!- Decía Sanji mientras tenía corazones en los ojos ignorando al peli verde

- ¡NO ME IGNORES COMO SI FUERAS GRAN CISA ERO-COOK - A Zoro le comenzaban a saltar chispas - Maldito rubio, desde que me confesé ha estado algo raro pero...se siente bien por alguna razón... - Se dijo Zoro en su mente

Esa misma noche Zoro tenía que hacer el papel de vigilante desde la torre que se encontraba en el centro del barco, mientras estaba arrecostado en la torre mirando hacia arriba escuchó un ruido, al parecer alguien estaba entrando a la torre mediante la escotilla que había

- ¡Ey, Ptss! Musgo, ¿estás despierto?- Era Sanji, Zoro se asombró verlo ahí a esas horas de la noche

-¿Huh, tú qué haces aquí? ¿Vienes acaso a discutir?- Sanji ignoró sus comentarios mientras terminaba de entrar a aquella habitación, simplemente se sentó al lado del espadachín a mirar hacia las estrellas por la ventana

Durante un momento reinó el silencio pero no estaba siendo nada incómodo, al contrario, era muy agradable y acogedor

- Oi, Ero-Cook - Dijo Zoro de repente con una voz tranquila - Tú... ¿Cómo has estado?-

- ¿Huh? Pues, ahora estoy mucho mejor, solo le falta un poco al pie para estar sano del todo pero, estoy bastante bien - Mientras Sanji le estaba respondiendo el de cabellos verdes lentamente se levantó hasta quedar sentado en el suelo - ... ¿Tú cómo sigues? - Preguntó Sanji

-...- Zoro se quedó en silencio por un momento - Aún hay algo que me pesa... Pero, estoy mucho mejor -

- Eso... - Sanji acercó su mano a la de Zoro para posarla en ella - Eso se escucha bien.. - Zoro se sorprendió, no esperaba que hiciera eso. Giró su cabeza para ver a Sanji, hizo contacto visual con él; sus ojos brillaban, estaba sonriendo levemente. Se sentía tan cálido con esa mirada y la mano del cocinero, se sentía un poco más delgada y era muy suave a comparación de sus manos llenas de cicatrices y resecas por el hierro de las Katanas