Esta es la historia de un joven agente policial que esta en busca de una mafia llamada Los Medici, los cuales han cometido crímenes y estrago por todo el Reino Canopia, y el junto a sus compañeros de trabajo y conocidos buscaran la manera de pararle...
En el capitulo anterior la joven Dahlia fue recibida jovialmente por Lorenzo Medici en sus tiempos de necesidad, fue educada enseñada y se convirtió en una Medici mas que trabajaba por ese linaje familiar, continuación proseguimos con el ultimo tramo del pasado de Dahlia
Dahlia narrando
Sip, mi primer trabajo fue encargarme de unos rusos mafiosos, Lorenzo ya me había mantenido informada de lo que iba a hacer mientras viajábamos en altamar, el hombre me pidió a solas que matara a todos los mafiosos que se encontraban en el edificio y que despues me fuera sin dejar rastro mío, y así fui a hacer mi primer trabajo
En la cima del edificio
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Música para el inicio de esta escena
Se encontraba Yakov disfrutando la vista tranquilamente, hasta que uno de sus hombre llegó despavorido a su habitación con noticias
Rex: S-S-Señor, dijo asustado
Yakov: ¿Ahora que Rex?, dijo algo molesto
Rex: ¡H-Hay una loca en el edificio que esta m-matando a todos nuestros hombres!, dijo asustado
Rex: Hace d-diez minutos señor, m-mire las cámaras
El ruso no podría creer lo que veían sus ojos, Dahlia se encontraba matando a cada uno de sus hombres con su cañón de mano y con armas ocultas como si fuese una tarea sencilla
Yakov: ¡¡Llama a los demás de los pisos de abajo y ordénales que vengan arriba!!, no voy a permitir que una simple mamarracha tome mi vida
Rex: ¡¡Si jefe!!, dijo mientras corría y sacaba su radio
Mientras tanto en los pisos de abajo
Los mafiosos caían uno a uno, unos a base de los proyectiles del lanzagranadas de su brazo, otros cortados y muertos por la gran cierra y cuchillos ocultos que traía, hasta que alguien la quiso agarrar por su espalda
Matón: JA, ¿ahora que vas a hacer?, dijo mientras la intentaba ahogar con sus manos
Dahlia pensó rápido y con una de sus cuchillas ocultas la enterró en las partes nobles de su agresor, este al sentir el inmenso dolor se retorció en el piso, tres matones intentaron matarla con una ráfaga de balas, pero ella disparó rápidamente balas ígneas para quemarlos por completo, subía poco a poco los pisos del edificio, pero el ruido de los disparos alerto a Yakov demasiado para pedir a sus superiores un helicóptero
