My time

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El timbre volvía a resonar en los pasillos, era la hora del almuerzo y Jungkook no se veía por ninguna parte, Fanny lo busco con la mirada en cada esquina mientras caminaba hasta la cafetería común, y solo vio a sus compañeros que le hicieron un par de preguntas metiches, la típica “¿Jeon te gusta?”, a la que ella se limito a contestar con un “somos amigos”, pero ni esa respuesta le agrado a YuSoul que esperaba que llegara al comedor para hacerle una de sus bromas aquellas.

Aunque, antes de entrar, el teléfono de Fanny vibró, el que ella miró solo por curiosidad, un texto simple que la hizo sonreír y devolverse por donde había llegado para alcanzar las escaleras y subir entre escalones hasta la azotea.

Su lugar secreto.

Al abrir la puerta se fijó del lugar, había plantas por doquier, se miraba incluso más hermoso que antes, la felicidad la lleno en ese momento, se acercó a la barandilla y el viento soplo con fuerza moviendo su cabello por los aires.

— ¿Te gusta? —giro en su eje

— Creí haberte dicho que me avisarás si estabas aquí, así no nos encontramos en el mismo lugar.

— Otra vez con eso —murmuro y dió pasos hasta llegar a ella— el asunto es que no me importa, yo…

Steff se quedo viendolo fijamente, ¿que le diría?, ¿porque tanta seriedad?. Quizas ella se había pasado y el solo quería ser amable.

— El asunto —repitio y volvió a quedar en silencio.

— Estaba bromeando —le dijo con un toque de diversión en su tono— creo que soy mala para esto, las dos veces que he intentado hacerte una broma terminas creyéndome.

— Lo siento, es solo que, para mí es difícil acercarme a otros —apoyo las manos en la barandilla— ¿Ya comiste?

— Recién habían tocado el timbre, estaba a punto de entrar al comedor cuando tú mensaje me llegó.

— Ya veo, entonces, vamos a comer juntos.

— ¿Qué?, no creo que eso sea buena idea.

— ¿Por que?

— Bueno, es que, después de lo de la botarga, comenzaron a decirse muchas cosas.

— lo sé, oi los rumores —miro hacía el horizonte—  ¿a ti te molesta?

— La verdad me da igual, es entretenido como te enteras de cosas que nunca hiciste.

— ¿Verdad? —sonrieron— entonces no hagamos caso y sigamos en lo que estamos.

— ¿Y en qué estamos? —Kook la miro detenidamente.

— ¿Compañeros?, ¿Amigos?

— Vamos por pasos, JungKookie, no deberíamos adelantarnos —Jeon sonrió tiernamente, al menos, ya no se quejaba de su presencia, y la forma en que lo llamo le hizo ternura.

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— ¿Te gustaría beber algo? —pregunto Jeon nervioso luego de hacer el ingreso a su casa en compañía de la chica.

Ella miraba todo a su alrededor, el lugar es amplio y bien hogareño, confrontable y olía bien en el aire.

— Am, claro, que tienes —respondio para fijar su mirada en el chiquillo que la veía con una sonrisa en su rostro.

— Agua, soda, jugo, y —hizo una leve pausa— ¿cerveza? —ambos se miraron y rieron, sabían que eran menores de edad, y les pareció divertido jugar con ello.