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Es Domingo, un día aburrido para Juan. Este no tenía nada que hacer y su hermano salió con el padre de su mejor amiga, aunque a veces se preguntaba porque estaban tan cerca éstos ultimos días.
J: "Que aburrido..." — Dijo el castaño.
Se acercó su mascota
P.A: "¡Oink!"
J: "Hola puerquito... ¿Que tal?" — Le respondió mientras lo acariciaba.
En eso, le llegó un mensaje a Juan
«Chat»
Osito: Hola Gafotas, te quería preguntar si querías salir hoy...
Gafotas: ¡Claro osito!
Juan se emocionó y se vistió. Spreen también se vistió y se llevó su cuaderno de dibujos. Estos se encontraron en la plaza, dónde todo adolescente iba con su pareja, amigo, o animal.
S: "Hola Gafotas..." — Lo dijo en un tono de enamorado.
J: Hola Osito, ¿Que tal? — Parecía nervioso, pero no le importaba.
S: Bien, te ves muy lindo hoy. — Hizo una suave sonrisa.
J: "Oh... Gracias osito, tu también te ves lindo..." — Estaba sonrojado, muy sonrojado.
S: "Bueno, vamos a pasear." — Le agarra la mano y salen a pasear.
Los dos paseaban y se reían, como una linda pareja, aunque no fueran una. Están comiendo helado y a Juan se le cae el suyo.
J: "Mi helado..." — Parecía que estuviera al borde de llorar
El hibrido notó eso, no podía dejar que Juan este triste y le dió el suyo.
S: "No te pongas triste, ten el mío." — Le da su helado
J: "Gracias oso." — Contesta con una sonrisa.
S: "No es nada gafotas, haría todo por tí."
A Juan se le salió un sonrojo, pero parecía un tomate. Spreen se rió por el tono de color se Juan. Estos pasaron la tarde en la plaza, ocultando sus sentimientos por el otro.
