𝐂𝐇𝐀𝐍𝐆𝐋𝐈𝐗
"Dime qué hacer, Yongbok".
Yongbok lo mira, intentando frenar su respiración para contenerse. Y quizás Changbin tampoco tenga el control. "Creo", hace una pausa, "creo que quiero que te quedes".
¡ 𝐀𝐃𝐕𝐄𝐑𝐓𝐄𝐍𝐂𝐈𝐀𝐒 !
━━━Chang...
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"Él te está mirando otra vez", dice Jisung perezosamente, mientras se sienta en una tumbona junto a la piscina; el calor del verano hace que su piel brille bajo la luz del sol.
Es un contraste con cómo Yongbok se esconde a la sombra de una sombrilla de playa. Tiene las manos metidas en las mangas largas de su cremallera blanca y su capucha levantada para proteger su rostro de la luz que se refleja en el agua de la piscina, "Y Minho te está mirando. ¿Tienes un punto?" Las mejillas del mayor se sonrojan mientras mira al otro alfa por el rabillo del ojo.
Y efectivamente, el pelimenta está mirando en su dirección, con los ojos probablemente fijos en Jisung debajo de sus gafas de sol oscuras. Lee prácticamente puede oler el interés del alfa a su lado como si el mismo lo estuviera frotando; El aroma ahumado de Han llena sus fosas nasales. Puede que haya dejado de fumar, pero todavía huele a humo fuerte y debería ser desagradable, pero reconfortante. Siempre le han gustado los alfas con olor más fuerte.
"Sólo digo que ya no está siendo muy sutil. La gente ha comenzado a notar tu relación", dice Jisung, y su aroma se suaviza mientras se concentra nuevamente en su conversación, "Y ya no eliminas su aroma tampoco. Y apuesto a que él también huele como tú".
"No hay ninguna relación. Soy un omega masculino y que le gusta ser conquistado. No sorprende que quiera que los demás sepan que tiene algo raro que ellos no tienen".
"Claro, si eso es lo que quieres creer... simplemente no veo por qué tiene que ser él", frunce el labio con disgusto, pero Felix no se ofende. Changbin no es conocido por su capacidad para tener gente como él; la mayoría no lo hace, en absoluto.
Aunque Lee no necesariamente diría que le gusta ese alfa, Seo le ofrece protección que otros no pueden... y también es un polvo fenomenal. Sumado a eso, aunque Changbin no lo tocaría sin su permiso, además no permitiría que nadie más se acerque a él (aparte de Jisung). Felix ha sido reclamado, le guste o no... Y le gusta... incluso si no lo admite.
El omega observa la forma en la que el rostro de Changbin brilla en la luz, en como esa lengua lame los bordes afilados y siente un cosquilleo familiar en su columna ante la acción, pero la sensación se resbaladiza en sus pantalones cortos de baño, no puede ser cierto.
"¿Yongbok?" Jisung huele el aire y su rostro se arruga: "Hueles como un pastel recién glaseado".
Y el omega se toma un momento para evaluarse a sí mismo, porque ahora que está prestando atención, se siente mal. Presiona una mano contra su frente y su piel está hirviendo en fiebre, nota como si sus pantalones cortos se le estuvieran pegando a sus muslos. Los ojos del pecoso se abren al darse cuenta. ¿Cómo podría olvidarse de algo tan importante como esto?
"Mierda", maldice, y su amigo lo huele de nuevo desde su silla.
"Hueles como si estuvieras en celo".
"Porque lo soy", le espeta molesto, pero el alfa a su lado no parece tomárselo como algo personal. Esta es exactamente la razón por la que juega tantos juegos como puede, así cuando llega su celo no tiene que preocuparse por recibir un láser en la cabeza cuando está gimiendo alrededor de un nudo de silicona como una perra en celo, "Tengo que hacerlo. Sal de aquí", le dice Yongbok, "Te veré en unos días".
