Parte 12

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Lisa tenia una mezcla de emociones dentro de ella, fue como si todo su mundo se derrumbara en un segundo, estaba por llegar a la cima y la realidad, Jungkook la trajo de regreso a la realidad de un bofetón en la cara , ver la cara de decepción, incrédulo , dolido..., simplemente no podía ni con ella misma, trato de ponerse un pantalón lo mas rápido posible al escuchar la puerta de abajo cerrarse con fuerza supo que no tenia tiempo de nada mas, se ato una toalla con rapidez en el torso y bajo las escaleras con la respiración agitad maldiciendo por dentro...cuando llego a la calle corrió con todas sus fuerzas tratando de alcanzar a kook.

-Jung...detente!!!---grito, aunque este no freno la castaña logro alcanzarlo.

-Mierda!!! que te e hecho?---grito frustrado Kook, agarrándose el cabello y volviendo a caminar..----No te atrevas a tocarme, mierda!!--le exigió cuando Lisa estaba tratando de agarrarlo del  brazo.

Lisa suplico sin cesar pero todo fue en vano. Kook giro hacia la derecha agarrando la otra calle y ella supo que necesitaba espacio, que de nada serviría humillarse mas, así que decidió dar media vuelta y regresar a casa. Cuando iba a la mitad de la cuadra pudo ver la camioneta de Rosé alejarse en sentido contrario, abatida pero aliviada de encontrarse sola decidió entras a casa y echarse en el sillón.


POV LISA


A las mañana siguiente Lisa despertó con el ruido de la puerta de la casa cerrarse, supo de inmediato que se trataba de  Kook, la realidad, es que apenas había podido conciliar el sueño después de lo de anoche, ella necesitaba hablar con Jungkook, así que cuando escucho la puerta no dudo en bajar rápidamente las escaleras.

Ahí estaba el con los brazos cruzados y con cara de no haber dormido nada, Lisa sintió una culpabilidad inmensa y solo se quedo al lado de las escaleras, respetando su espacio. hubo un silencio casi eterno, hasta Kook decidió romperlo.

-Ni siquiera me viste, estabas parado ahí y tu solo... estabas fuera de ti. ---pareció haber soltado una reflexión que fue muy meditada anteriormente.

-Es una mujer....--intento replicar.

-Eso no importa.--la freno algo triste.

Lisa suspiro sin saber que decir y acorto cautelosamente la distancia entre ellos, solo separados por la mesa que dividía el living de la cocina.

-Dime lo que necesito hacer para arreglar esto, para retomar lo nuestro.--dijo en suplica.

-Eres lesbiana? --pregunto sin importarle lo que acababa de escuchar.

-Me conoces hace seis año, casi siete.--comenzó a decir Lisa, para contradecirlo.

-Pensé que era así... te llame tres veces tratando de localizarte, de avisarte que llegaría antes a casa de lo planeado, esperando que te pusieras feliz....Pero estabas con ella.

-Kook, aun te amo, nada ha cambiado entre  nosotros.

-Lo vi con mis propios ojos, Lisa!!

-No puedo perderte---suplico la castaña

-Termínalo.--contesto Kook luego de unos segundos de reflexión.

-Eso ya se acabo.-- le aseguro.

-No, quiero que lo termines en persona o nunca me volverás a ver.

-Puedo ducharme? iré después al trabajo estoy hecha un desastre ahora.--trato de negociar.

-Quieres lucir bien para ella?.--pregunto con algo de rechazo.-- ven vámonos.--dijo agarrando las llaves del coche, no dejándole opción.

-Lo hare. --le aseguro.

Ambos subieron al coche y el camino fue un total silencio, solo guiado por las indicaciones de Lisa le daba para llegar a su destino, se sentía totalmente atrapada, quería mejorar las cosas con Jungkook y dejar esta historia atrás, pero la idea de dejar a Rosé... la partía en mil pedazos, no tuvo mucho tiempo de pensar por que cuando se quiso dar cuenta, Kook estaba estacionando el coche al frente de edificio donde vivía Rosé. Miro a los ojos a Kook una vez mas antes de bajar y tomar el valor para hacerlo.

Entro delicadamente al edificio y subió las escaleras, con el corazón latiéndole a mil por hora y con la respiración algo agitada, las lagrimas ya amenazaban con salir de sus ojos pero trago fuerte cuando se dio cuenta que ya estaba frente a la puerta , toco dos veces y nadie contesto, empujo un poco la puerta y esta se abrió.

Apenas entro y pudo ver a Rosé apoyada sobre la heladera y mirando directamente hacia sus ojos, como esperándola, pero rápidamente de cruzo de brazos y desvió la mirada, clavando un puñal en el corazón de Lisa.

-Lamento mucho haberte dejado...--comenzó--Tuve que ir tras el..--explico como si fuese una obligación y se acerco un poco mas a la rubia, acortando un poco la distancia pero no demasiado.

-Jungkook esta esperando afuera.

Por que?.--soltó la rubia sus primeras palabras, esta vez mirándola.

-Necesito terminar esto.--dijo Lisa con un par de lagrimas ya cayendo por sus mejillas.

Rosé solo suspiro con pesar, se dejo caer al suelo, arrastrando su espalda aun contra la heladera, su mirada se clavo en un punto fijo hasta que Lisa se incoó  frente a ella.

-No quiero hacerlo.--negó todavía llorando.

-Pero tienes que hacerlo.--entendió Rosé tratando de no mirarla, le rompía el corazón en mil pedazos.--

-No debí haberte puesto en esta posición.

Lisa bajo la mirada y otra lagrima salió, no podía parar.

-Pero yo lo quería, Todavía lo quiero....--admite.

-Si, pero no te quiero de esta forma.--dijo sabiendo que nunca seria la otra.

-Por que no puedes comprometerte con algo.--se enojo un poco la castaña.

-Lisa.!!.--rio con un poco de amargura y expuso lo obvio.

-Que clase de compromiso seria esto? Estas usando un anillo de compromiso que alguien mas te dio.--señalo con la mirada el objeto.

Lisa rompió en llanto de nuevo, no sabiendo que decir, la rubia acaricio su cara, y unió sus narices, su cara se empapo de las lagrimas de Lisa  y esta cello la despedida con un beso tierno, Rosé sintió toda la dulzura de los labios de Lisa mezclada con lo salado de sus lagrimas, se separaron y la rubia le regalo un beso en la frente, se miraron por ultima vez, la castaña se paro del suelo, dándole una ultima mirada y se fue del departamento de la rubia dejándola totalmente abatida en el suelo.

Lisa por su parte, se seco todas las lagrimas antes de subir al auto donde la esperaba Kook, por unos segundos no fue capaz de dirigirle la mirada, hasta que lo hizo, no la pudo sostener por mucho tiempo, por que sintió que sus ojos se ponían rojos y nuevas lagrimas amenazaban con salir, trago en seco y mira al frente, agarrando su bolso que estaba en el suelo.

-Llévame al trabajo---fue lo único que pidió, todavía sin mirarlo y Kook obedeció.


Bajo su bocaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora