03; LEYENDAS VIVIENTES

467 76 2
                                    

1x03

LEYENDAS VIVIENTES

Era una mañana común en King's Landing, la gente se movía libremente entre las calles tratando de ganarse su pan del día o de comprar las cosas necesarias para su supervivencia. Todo estaba relativamente en paz, en armonía, tal como debían ser las cosas. El sol estaba brillando con fuerza sobre la ciudad cuando una sombra lo cubrió, oscureciendo la ciudad por completo a su paso. Todas las cabezas se levantaron para descubrir qué había sucedido con el sol que les brindaba calor y muchos gritos de sorpresa y horror pudieron escucharse a lo largo de la ciudad. Ver dragones era común, pero desde que Vhagar había abandonado la ciudad no se había visto uno así, mucho menos uno que no fuese Vhagar. Las escamas negras parecían carecer de brillo, casi como si absorbiera la luz a su alrededor, y con su tamaño fácilmente podría acabar con la ciudad de un solo movimiento si se lo proponía.

Solo los más viejos hablaban de una bestia así. En los libros se hablaba de él también, el dragón que desapareció con su último jinete hace ya mucho tiempo. Balerion, el terror negro. Pero no podía ser, ¿cierto?

Los cuidadores de la fosa se mostraron maravillados observando como Balerion descendía en el patio que habían desocupado previamente. Era un aterrizaje peligroso considerando el tamaño de la bestia, pero lo lograron sin destruir la fosa. Aerea suspiro de alivio al no escuchar el colapso de alguna pared tras el aterrizaje, durante todo el vuelo se había distraído pensando en eso para evitar pensar en su madre y su hermana, le había funcionado a medias. Con cuidado de no caer de la montura, otra vez, se soltó y descendió con movimientos calculados. Balerion se movió una vez ella tuvo sus pies en el suelo, la joven Princesa se acercó a la cabeza de su dragón y lo acarició con una sonrisa leve.

No te vayas, es peligroso—el dragón gruñó en respuesta.

Alejarse de Balerion le hizo sentir pesada, era todo lo que tenía en ese momento, solo se tenían el uno al otro y tener que alejarse se sentía mal. Sobre todo sabiendo que había gente, traidores, viviendo dentro de las paredes de la Fortaleza a la que una vez llamó hogar.

Regresar a la Fortaleza le cortó la respiración, los recuerdos regresando como la fuerte corriente de un río, amenazando con ahogarla si no salía de ahí. La voz de su madre, la separación de su hermana, Maegor nombrándola heredera, Jaehaerys tomando el trono. Tuvo el impulso de regresar su desayuno, pero lo aplastó enseguida, iba a terminar con eso de una vez e iría a visitar a su hermana. Se despediría de ella. Los pasillos que llevaban a los aposentos del Rey eran tan familiares y a la vez tan desconocidos que los recuerdos se mezclaban entre sí apretando su corazón con cada paso que daba. En esas paredes su madre fue forzada a casarse con Maegor, en esas paredes tuvo que vivir con el asesino de su padre, en esas paredes vivió por un año siendo Heredera.

El sonido de puertas siendo abiertas la regresó al presente, disipando la nube de recuerdos que había caído sobre ella. Sus pasos eran suaves mientras caminaba detrás de Laenor y Rhaenyra, siguiéndolos al interior de los aposentos del Rey dónde el hombre ya los esperaba, portando su corona, acompañado de otra mujer Targaryen y una persona más vestida de verde. Suponía que era una de las personas de las que Rhaenyra dijo eran traidores. Sus ojos cayeron sobre el Rey que la miraba con ojos curiosos, como si no creyera lo que estaba viendo.

—Es justo como las pinturas—el hombre murmuró.

—Princesa Aerea, este es mi padre, el Rey Viserys—lo presentó Rhaenyra.

—¿Cómo es esto posible?—preguntó la mujer vestida de verde.

—Es un milagro de los dioses, una buena señal—el Rey sonrió y señaló una silla a su derecha—. Tenemos muchas cosas de qué hablar, Princesa.

daylight. (aerea targaryen x cregan stark)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora