No, imposible

1.5K 93 4
                                    

Emily

Apenas llegó mi hermana me fui a mi casa y me acosté a descansar. Tenía un dolor en mi espalda baja y solo pensé en dormir para pasar el dolor.

Desperté dos horas después y me di cuenta que me había perdido el partido. Mi teléfono estaba a mi lado y habían varias llamadas de Pedri, no noté ninguna. Hice el intento de llamarlo pero mi teléfono justo se apagó.

Me levanté para ir a buscar el cargador y apenas toco el piso siento un líquido bajar por mis piernas, no podía estar pasándome esto. No podía haber roto aguas. Baje mi mirada y me di cuenta que no era lo que había pensado, me alarme mucho más al ver el líquido rojo que corría por mi entrepierna. Coño, esto no podía ser peor. Malditas hijas de puta, en especial esa rubia.

Intenté moverme y un fuerte dolor atravesó todo mi cuerpo y cada vez fue haciéndose más fuerte.

Tenía miedo. Miedo de que le pasará algo a mi bebé.

Llegué hasta el baño y luego vi caer agua, no podía salir peor. Me dolía montones, pero debía darme un baño. No iba a ir así.

Luego de 5 minutos estaba tomando las llaves del auto, muy tonta pero no tenía batería para esperar que encendiera.

—joder-apreté el volante-todavía no, bichita. Tu papá no está aquí, tu habitación todavía no está completamente lista y yo no estoy lista para parir.

Encendí el teléfono y llamé a mi hermana, le conté la situación y me habrá dicho una cuentas palabras y llamando idiota por el estado que estaba conduciendo.

Llegué y bajé apenas, sentía mi vista nublada hace unos minutos atrás. No quería desmayarme en el auto y menos en medio de la calle.

—Emily-escuché decir a mi hermana y sujetarme-por favor ayuda.-gritó-eres un idiota como se te ocurre salir así.

—no pude..llamarte antes..joder esto duele mucho-me quejé cerrando fuerte mis ojos-necesito que llames a Pedri.

—hace un rato me llamó para preguntarme si sabía algo de ti.

—no te explicaré nada ahora, cele. Mi hija quiere salir y yo no estoy lista.-le grite-

Me ingresaron a una sala de parto porque lo estaba, estaba en trabajo de parto y sabía lo que significaba y sabía lo que corríamos peligro. El médico me estuvo hablando minutos atrás.

—su papá no está, no puedo hacerlo sin él.

—Emily debemos sacar a tu bebé, corren peligro.

—no puedo-solté lágrimas, estaba cansada y dolía-

—debes hacerlo por ella y por ti.

—¿puede entrar mi hermana?

—claro.-me sonrió-pero debemos ya sacar a la pequeña.

Me prepararon y mi hermana entró vestida como uno más de los enfermeros que estaban junto a mí.

—el ya viene. Tomó el primer vuelo que encontró, llegará dentro de unas horas.

Dear pedri/Pedri gonzález Donde viven las historias. Descúbrelo ahora