20 dic. 2023
Se acerca navidad y, por ahora, las cosas no parecen mejorar entre Emmanuel y Esperanza. Ellos están discutiendo desde el día uno y siguen.
Entre este grupo hay dos mesas grandes. Una para Los Rojos y otra para Los Azules.
Emmanuel se sentó en la mesa de su equipo y al lado, se sentó Renata, el ya estaba preparado para la charla que iba a dar la anteriormente mencionada.
— Hola Emmi. — Saludó amorosamente a Emmanuel alargando la última vocal.
— Hola.
— Hay no sabes lo que me pasó ayer. — Renata estaba por empezar a contar su historia. Hasta que, para la salvación de Emmanuel, llegó Esperanza y se sentó al lado de Renata.
— Hola Reni. — Saludó Esperanza amablemente. — Decí que te tengo a vos en el equipo, porque sos muy buena persona comparada con otros estúpidos.
— Ay, Espe, dejá de joder. — Dijo secamente Renata. — Ya creo que todos sabemos el odio que se tienen, pero tampoco que lo presumas como un premio.
— Ay dios Reni. — Respondió Esperanza.
El profesor anunció un juego de pileta, así que todos empezaron a irse hasta dicho lugar. El juego consistía en ir desde un lado al otro, de a un jugador por equipo, con un tarro con agua en la cabeza el cuál no se podía sostener con las manos en el transcurso de llevarlo. Cuándo ya llegaste, hay que, ahora sí con las manos, dejar el agua en el balde que estaría del otro lado. El equipo que, en diez minutos tenga más agua, ganará.
— ¡Vengan Los Azules acá! — Anunció Martín, a lo que Lucia y Mia llegaron rápidamente, pues ellas estaban cerca de él. — Tengo un plan en mente, intenten nadar lento y preciso, no hagan nados que les dificulte el equilibrio.
— Yo diría que hagamos el nado de rana, ese es bastante tranqui. — Sugirió Mia.
— Hagamos ese, y cuando vuelvan con el tarro vacío, naden los más rápido que puedan. — Martín, evidentemente era el capitán.
— No les vamos a ganar. — Agregó Mia. — Pero no se lo dejaremos fácil.
Se escuchó el silbato del profesor, que indicaba que era hora de jugar. Empezaron ganando Los Azules, por qué fueron primero los más rápidos, pero Los Rojos sacaron ventaja de los jugadores más lentos. Estaban a dos minutos de terminar, y todo indicaba que ganarían Los Rojos, pero alguien de Los Rojos hizo un comentario sobre Emmanuel y Esperanza, y a los antes mencionados no les gustó mucho que digamos, y se formó una discusión. A raíz de esto, Los Azules sacaron nuevamente ventaja y ganaron 2 códigos.
Después de que Los Rojos perdieran, en la hora de merendar, como era de esperarse, Renata le estaba haciendo un escándalo a Emmanuel
— No puede ser que te hayas puesto a discutir en medio del juego Esperanza. — Renata estaba enojada. — Yo lo entiendo al Emmi, porque ese comentario lo ofendió mucho y bueno. Pero vos, osea sos joda o que onda?
— Bueno, perdón. — Esperanza intentaba que Renata no se enojara con ella. — ¿No querés galletitas con chispitas?
— No, dejá, ando haciendo gimnasio, al igual que el Emmi. — Agregó Renata.
— Más para mí. — Esperanza estaba por comer una galleta y una mano le robó la galleta que tenía en la mano. — HIJA DE PUTA VENÍ PARA ACÁ.
— MUEJEJEJEJEJE. — Mia salió corriendo para su mesa victoriosa, y con una galleta gratis. — Tomá, Ity, para vos. Perdón que se me haya olvidado la merienda. — Un dato, a Mia siempre le gusta darle comida a Lucia, ya que ella siempre tiene hambre.

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Momento Exacto
HumorEstá historia es un "Enemies to lovers" que trata de mí mejor amiga y su crush. Recuerden que es la primera vez que hago un "Enemies to lovers" así que perfecto no va a ser. También está un shipp de mí amiga con su amigo 👍